El Ejecutivo aplaza pedir la devolución de la paga a sus trabajadores eventuales

El portavoz del Gobierno, Josu Erkoreka, ha explicado esta mañana después de la reunión semanal del Ejecutivo que se ha tomado la decisión de “no iniciar el proceso de reclamación” del equivalente a la extra de navidad cobrada entre julio y noviembre por trabajadores eventuales de la Administración autonómica. Las personas afectadas suman unas 12.000 personas y la cuantía asciende a ocho millones de euros.

La decisión ha sido tomada por el Gabinete tras analizar el informe que la semana pasada solicitó a sus servicios jurídicos. Erkoreka ha precisado que el texto no recoge la recomendación de iniciar el procedimiento de reclamación de esas cantidades, por lo que se ha decidido evitarla “en aras a causar el menor daño posible”. Eso sí, el portavoz ha matizado que habrá que “esperar a que el Tribunal Constitucional se pronuncie a este respecto”.

El alto tribunal tiene pendiente de resolver el recurso que el Ejecutivo central planteó contra la decisión del anterior Gabinete de Patxi López de pagar la extra de Navidad a todos sus funcionarios, resolución a la que renunció tras paralizarla el Constitucional.

Por otro lado, el portavoz ha explicado los ejes sobre los que pivotarán los planteamientos que el lehendakari, Iñigo Urkullu, llevará a sus reuniones con los tres diputados generales, con los que iniciará su anunciada ronda de contactos con agentes políticos, económicos y sociales.

Erkoreka ha señalado que uno de los tres aspectos que tratará en dichas reuniones será negociar la “posibilidad de una nueva política fiscal”. Se trata de un aspecto ya avanzado por el lehendakari durante la campaña electoral, pero también un debate que el PNV ha rechazado ante las peticiones del anterior Gobierno  de abordar la política fiscal como la única vía para evitar los recortes en áreas esenciales.

Urkullu planteará a los diputados generales abordar una nueva política fiscal y proyectos para reactivar la economía

En las citas también se pondrán sobre la mesa los programas o trabajos compartidos entre el Ejecutivo y las Diputaciones en materia de reactivación económica y creación de empleo. Por último, se buscarán fórmulas para reforzar la red de servicios sociales, en la que el Gobierno, las instituciones forales y los Ayuntamientos tienen competencias.

Las primeras dos reuniones llegarán mañana, con los diputados generales de Álava y Gipuzkoa, Javier de Andrés y Martin Garitano, respectivamente. El lunes próximo, Urkullu recibirá al mandatario vizcaíno, José Luis Bilbao.

De Andrés quiere hablar con el lehendakari de "temas comunes" que afectan a todo el País Vasco, como la caída de la recaudación y la consiguiente falta de financiación, tanto en las instituciones como en las empresas, según fuentes forales que cita Efe. También le expresará su preocupación por la "situación política, con el enfrentamiento entre partidos" y le pedirá fomentar las inversiones en investigación y desarrollo en Euskadi.

De su lado, Garitano también tratará con Urkullu sobre las medidas necesarias para hacer frente a la situación económica, le planteará la necesidad de poner en marcha algunas reformas, como la de la ley de Aportaciones, y espera poder intercambiar impresiones con el lehendakari respecto al proceso de "normalización política" del País Vasco, según fuentes guipuzcoanas.