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La Plataforma por Corcoesto asegura que la firma minera que busca oro no tener licencia

Oposición en Castrelo de Miño a una compañía que rastrea minerales estratégicos para la industria en cuatro municipìos de la comarca

La Plataforma pola Defensa de Corcoesto asegura que la empresa minera Edgewater "tiene que cerrar de forma inmediata" su centro de trabajo en localidad del municipio coruñés de Cabana de Bergantiños en el que realiza actividades de exploración en un filón de oro "por carecer de licencia" para realizar esta labor.

Así lo apunta esta plataforma vecinal en un comunicado en el que subraya que este centro de trabajo en Corcoesto está situado en suelo rústico de protección ordinaria, por lo que el Ayuntamiento de Cabana "no puede otorgar licencia municipal para actividades relacionadas con la explotación minera" al tratarse de un uso que necesita autorización autonómica por ley.

Asimismo, remarca que no va a consentir "ningún trato de favor por parte de las autoridades con la empresa minera de Corcoesto", de forma que acudirán a la Fiscalía ante cualquier indicio de prevaricación.

La Plataforma denuncia que las instalaciones de almacenamiento, oficinas y laboratorios geológico "no son legalizables ni cumplen con los requisitos para que se le pueda otorgar a la empresa minera licencia".

"La empresa canadiense (Edgewater) parece especializada en el incumplimiento de la normativa española en general y de la medioambiental en particular, al que ahora hay que sumar también el ejercicio de la actividad minera", concluye el colectivo.

Por otra parte, en Ourense, otro proyecto minero que está en fase de investigación ha provocado la oposición vecinal en el municipio ourensano de Castrelo de Miño y ha llevado a que dos de los cuatro ayuntamientos afectados por estos planes estén preparando sus alegaciones en contra.

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Según informa Europa Press, se trata de los ayuntamientos de Castrelo de Miño y Arnoia, que han comenzado la redacción de los escritos de alegación contra un proyecto minero que incluye prospecciones y pruebas industriales en 1.680 hectáreas de terreno de cuatro municipios, entre las que hay zonas protegidas, según consta en el informe presentado por la empresa solicitante ante la Xunta de Galicia. El plazo límite para presentar las objeciones finaliza el 12 de enero de 2013.

Los planes han sido presentados por la empresa salmantina Minas y Geología, SL, bajo el nombre de 'Wolfran Aurense', y tiene como objetivo investigar la existencia de posibles yacimientos de minerales de interés como litio y óxidos de silicio, wolframio, estaño y de "tierras raras" como tantalio y otros, aplicando técnicas disponibles en la actualidad para mineralizaciones finas y que permitan recuperar material con nuevas tecnologías del sector.

En el caso de Castrelo de Miño, los vecinos conocieron el proyecto minero en una asamblea celebrada esta semana y en la que ya acordaron presentar sus propios folios de alegaciones, tan solo un mes después finalizar un proceso similar para intentar bloquear la apertura de una cantera de granito, cuyo proyecto afecta a cinco de las siete parroquias del ayuntamiento.

El vocal de la Asociación para la Defensa Ambiental y Cultural de las 'Ribeiras del río Miño', Horacio Paz, ha explicado que, ahora que el colectivo ya está legalmente constituido, "la directiva tendrá que reiniciar el proceso para poner freno a una nueva actividad minera que afecta, en el caso de Castrelo de Miño, a terrenos integrados en zona natural protegida desde la década de los 90.

En este ayuntamiento los vecinos han decidido solicitar por escrito que se deniegue la autorización al proyecto de investigación minera que durará tres años, porque supondrá "quebranto de la voluntad de muchísimos vecinos que apostaron por sectores productivos como el del vino, el turismo verde o la pesca, mucho más compatibles con el uso racional de los recursos naturales", según el texto inicial, al que tuvo acceso Europa Press.

Incluirán en sus alegaciones su exposición a ruidos, tráfico y vibraciones para 300 viviendas particulares, que la actividad prevista es incompatible con la protección del espacio natural 'Ribeiras do Miño', que afectará a canales de agua, regatos, captaciones de agua para uso vecinal, "mámoas" (dólmenes) y petroglifos inventariados y a terrenos catalogados por la Xunta como Zona de Especial Interese Agrario (ZEIA).

El alcalde de Castrelo de Miño, Xurxo Méndez, ha explicado que esos argumentos serán básicamente los esgrimidos por el ayuntamiento en su escrito de alegaciones, y recordó que las instituciones públicas llevan años invirtiendo fondos públicos para potenciar en la zona los sectores vitícola, turístico y forestal.

En el caso de Arnoia, el alcalde, José Camilo Fariñas, ha indicado que presentará alegaciones porque el proyecto afecta a 278,7 hectáreas en una ladera del simbólico monte conocido como Coto Novelle, en la que se sitúa la captación de agua para una parte de los vecinos.

"Esperemos que con esta alegación no haya problemas y se puedan hacer sondeos mineros teniendo cuidado con ese abastecimiento de agua en un lugar, que ya fue explotado por su mineral, y aún recuerdo que de pequeño vi lavaderos y alguna instalación más para esa actividad", agregó.

La documentación presentada por la empresa salmantina Minas y Geología S.L. ante la Xunta, salió de la administración pública a los ayuntamientos afectados con sello de registro del día 21 de noviembre.

Las alcaldesas de Cartelle y Ramirás han coincidido en señalar a Europa Press que recibieron la documentación hace semanas y que hay un técnico municipal que la estudia, por lo que decidirán si presentan o no alegaciones a partir de la próxima semana.

En el caso de Ramirás, la alcaldesa, Pilar Otilia López, ha explicado que hubo minas de estaño en el lugar conocido como Escudeiros, en las que recuerda un nivel de extracción muy bajo durante su infancia y que llevan más de 50 años totalmente abandonadas.

El proyecto de Minas y Geología se elaboró en septiembre de 2012 y se presentó en la Xunta de Galicia, para tramitar la autorización de investigación, con el nombre de 'Wolfran Aurense', en los municipios de Cartelle, Castrelo de Miño, Ramirás y Arnoia, de los que el más afectado es Cartelle, con 929,7 hectáreas de terreno.

Según el informe empresarial, la zona acotada en 59 cuadrículas incluye antiguas minas de estaño, wolframio, scheelita y arsenicales auríferos obtenidos a mediados del siglo pasado en minas situadas en el Coto Novelle, limítrofe entre Cartelle y Arnoia.

Se recogerán muestras en lugares cuyo acceso sea por caminos ya existentes en la zona, y según el informe, se analizarán en las universidades de Salamanca y Valencia.

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