Un paro cada seis meses

El ritmo ha sido infernal. Ningún Gobierno ha soportado la presión sindical de una huelga general cada seis meses y dos semanas, salvo el de Patxi López en los 40 meses que han pasado entre mayo de 2009 y septiembre de 2012.

Aunque la coyuntura también es excepcional, los sindicatos vascos, sobre todo los nacionalistas le han recibido y le van a despedir con una huelga general, y en medio le han convocado otras cuatro, además de las del sector público que convocaron todos, aunque por separado, el 25 de mayo de 2010 —ELA y LAB— y el 8 de junio de 2010 —CC OO y UGT—.

Más allá de lo que pase en las urnas el próximo 21-O, el primer Gobierno no nacionalista de las últimas tres décadas se ha desayunado con seis huelgas generales. La primera fue la de bienvenida, el 21-M de 2009 apenas dos semanas después de acomodarse en Ajuria Enea.

La segunda, convocada también por los nacionalistas fue la del 29-J de 2010 contra los recortes del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero. La tercera llegó tres meses después por el mismo motivo pero esta vez convocada por los sindicatos CC OO y UGT, a la que se sumó in extremis ESK.

El 27 de enero de 2011 ELA y LAB volvieron a convocar huelga general y el 29 de marzo lo hicieron los cuatro sindicatos vascos contra la reforma laboral. Fue la más multitudinaria por su carácter unitario, aunque en realidad hubo dos convocatorias diferenciadas, la de los sindicatos nacionalistas y la de los no nacionalistas, pero en la misma jornada. La última, de momento, será la del próximo miércoles.