En busca de la molécula útil

Acoger la primera fase de la creación de fármacos y asentar a empresas que hagan posible el crecimiento a través de la innovación. No podía ser más optimista el mensaje del conselleiro de Economía, Javier Guerra, y del rector de la Universidade de Santiago, Juan Casares Long, en la presentación del proyecto de investigación “de más cuantía firmado por la universidad en los últimos tiempos”. La recién nacida plataforma InnoPharma, financiada con 10 millones de euros, aprovechará las investigaciones realizadas en el seno del grupo Medicina Xenómica de Ángel Carracedo y en el BioPharma, dirigido por Isabel Loza, para desarrollar medicamentos contra el cáncer o dolencias neurodegenerativas como el Alzheimer. El objetivo es que el estudio de los investigadores de uno y otro grupo derive en la creación de patentes, de empresas spin-off y de fármacos candidatos a fases preclínicas. “Esperamos crear especialistas en descubrimiento de fármacos y que puedan quedarse en Galicia”, adelantó la profesora Loza. Su equipo buscará moléculas a partir de las que elaborar fármacos para dianas terapéuticas, una parte de la célula que reacciona ante medicamentos concretos, previamente identificadas por el grupo de Ángel Carracedo.

 El proyecto de investigación durará cuatro años y se financiará con ocho millones procedentes de fondos europeos y dos aportados por los dos grupos integrantes de Innopharma. “Es un sueño poder hacer mejores medicamentos para combatir algunas de las enfermedades que más dolor causan a las personas”, proclamó Loza, que se felicitó por un proyecto que, auguró, “permitirá aplicar el extraordinario conocimiento biomédico existente en Galicia”. Del proyecto se ocuparán una decena de investigadores, aunque tantos Carracedo como Loza aspiran a que esta cifra vaya creciendo con el tiempo. Según el rector de la Universidade de Santiago, ya hay 15 empresas farmacéuticas interesadas en el proyecto —entre ellas, la británica GSK— que, aunque por ahora tiene carácter estrictamente universitario, nace con la meta de atraer empresas “de ámbito mundial” a Galicia. Esta es la prioridad para el conselleiro de Economía, Javier Guerra , que incluso afirmó que el compromiso de su departamento con las firmas innovadoras es tal que no apoyará, por ejemplo, “a firmas que fabriquen ladrillo de la forma en que se hace siempre el ladrillo”.

El presentado ayer en el Pazo de San Xerome es el primero de los proyectos financiados por el Fondo Tecnolóxico que recibe el visto bueno. Quedan otros 17 de grupos de investigación de la Universidade de Santiago que también optan a recibir financiación: uno de ellos se firmará en las próximas semanas, aunque Casares Long no quiso dar ningún detalle sobre su ámbito de estudio ni tampoco sobre la partida que recibirá. Las solicitudes se presentaron el pasado verano en convocatoria abierta y aún quedan 100 millones del fondo por asignar a un número de proyectos sin determinar. Según el conselleiro de Economía, Galicia ha gastado ya el 50% de los recursos que le corresponden del fondo. “En 2009 el uso no llegaba al 5%”, comparó Guerra, que se comprometió a agotar los 100 millones que faltan porque de no hacerlo ese dinero se pierde. “Son fondos competitivos, así que si nos eligen a nosotros es que algo estamos haciendo bien”, se congratuló Casares Long.