“Los recortes en sanidad aumentarán el negocio de los seguros privados”

La revolución sanitaria que planea el Consell ha despertado las expectativas de los cuatro grupos de hospitales privados que operan en la Comunidad Valenciana. Ángel Gómez (La Vila Joiosa, 1970) es consejero delegado de Imed Hospitales, una firma con tres centros en Benidorm, Teulada y Elche que facturó 28 millones de euros en 2011. El grupo nació en 2004 impulsado por hoteleros alicantinos y participado en un 32% por Bankia. Promueve la clínica de Burjassot, que abrirá en verano del próximo año.

Pregunta. ¿La sanidad es un buen negocio?

Respuesta. Es una actividad muy dura que requiere trabajo. El sector tiene un margen de beneficio de entre el 15% y el 17%. Nuestro grupo ha crecido con la aportación de los socios y la reinversión de los beneficios.

P. ¿Cómo valora la intención del Consell de reforzar la gestión privada en la sanidad pública?

R. Todo lo que aporte eficiencia es positivo. No está claro cómo se desarrollará el modelo, pero garantizará el sostenimiento del sistema.

P. ¿Cómo les afecta el nuevo escenario?

R. No lo sabemos. Esperamos a conocer los pliegos de condiciones y el tipo de servicios que se podrán gestionar. No descartamos optar [a una concesión].

P. ¿La posible irrupción de grandes operadores, como USP Quirón, puede dejar la gestión sanitaria en pocas manos?

R. No. Si el plan contempla la licitación solo de la parte no asistencial, se seguiría un modelo parecido al aplicado por la Comunidad de Madrid, donde las empresas, constructoras principalmente, ofrecen sus servicios y no gestionan la bata blanca.

P. Sin embargo, los planes del Consell pasan por una gestión privada también para el área asistencial, según publicó EL PAÍS.

R. Habrá muchas empresas interesadas. El plato fuerte del plan será la gestión de servicios no sanitarios. Cualquier firma puede encajar en este modelo.

P. ¿La gestión privada debería extenderse a todas las áreas asistenciales?

R. Sí. Se optimizaría la eficiencia del sistema.

P. ¿Cómo ahorrará el nuevo modelo hasta el 15% del gasto sanitario?

R. Con el aumento de la eficiencia de los servicios.

P. ¿Y eso qué significa? Reducir sueldos, disminuir prestaciones, recortar plantillas,…

R. Es el conjunto de muchas cosas. Aprovechar mejor las sinergias y ajustar en todas las partidas que se pueda.

P. Suena a precariedad laboral.

R. No tiene porqué.

P. ¿Prevén el aumento de su negocio por el deterioro de la sanidad pública?

R. Sí. El mercado asegurador no ha parado de crecer pese a la crisis. El pasado año, que ya se hablaba de copago y recortes, aumentó un 5%. El seguro ha dejado de ser un producto elitista y para rentas medias o medias-bajas. Si la sociedad percibe que la sanidad pública no es accesible y aumentan los recortes, invertirá en seguros privados.

P. ¿Se fían de la solvencia financiera del Consell?

R. Sí. Es impensable un default (quiebra) de la Administración. Antes de esa posibilidad, se tomarían las medidas para evitarlo, como los planes de ajuste.

P. ¿Cuánto tardan sus hospitales en cobrar de la consejería?

R. Dos o tres años.

P. ¿Y no denuncian?

R. No y tampoco me consta que ninguna clínica privada lo haya hecho.

P. ¿El auge de sus centros corre paralelo al deterioro de la sanidad pública?

R. No. La sanidad pública valenciana ha hecho un esfuerzo importante en inversiones. El crecimiento de la planta sanitaria ha sido mucho mayor al de la privada en los últimos años. Son dos modelos complementarios.

P. ¿Los intentos de venta de Ribera Salud y las dificultades económicas de la Generalitat confirman el fracaso del modelo Alzira?

R. No. Ribera Salud ha hecho un esfuerzo muy importante. Ofrece un planteamiento más rentable que la prestación de servicios públicos directos. A la consejería le sale más barato atender a la población a través de centros como el de Alzira que con hospitales públicos. Su coste per cápita es menor. No obstante, las dificultades de la Administración y el retraso de los pagos han creado un problema financiero importante en una empresa (Ribera Salud) en expansión desde hace ocho años.

P. ¿Por esas dificultades prefieren ustedes tratar lo mínimo con el Consell?

R. No es por eso. Mi modelo de negocio es la sanidad privada y la presencia de los conciertos es residual.

P. Bankia permanece en Imed, que promueve un modelo totalmente privado, mientras intenta desprenderse de la concesionaria valenciana de hospitales Ribera Salud…

R. El banco es un socio financiero, con una participación minoritaria. Desconozco las causas por las que Bankia quiere vender Ribera Salud, una inversión que consume tres veces más capital que nuestros hospitales y que requiere un pulmón financiero importante.

P. ¿Por qué el capital riesgo se interesa por la sanidad?

R. El modelo público con gestión privada ahorra costes. Se ha convertido en un referente nacional. Cualquier empresa que crece y ofrece expectativas resulta interesante para el capital riesgo. El interés de estos fondos por la sanidad privada responde a que el sector, que ha estado atomizado, tiende a concentrarse, como demuestra la creación del grupo más grande de la sanidad privada en España, USP Quirón.

P. Si el modelo Alzira es tan exitoso como dice, ¿por qué quieren desprenderse de él sus propietarios?

R. Desconozco las causas. Supongo que responde a las características del negocio, que es un proyecto a largo plazo y consume muchos recursos en su fase inicial, además de requerir el respaldo de capital.

P. ¿En qué estado se encuentran las obras del hospital Imed de Burjassot?

R. El centro arrastra un retraso de cuatro meses y estará acabado en verano de 2013. Se ha finalizado la construcción de la estructura y en breve comenzará el resto de la obra.