Conde Roa se quedó con el IVA que le pagaron los compradores de pisos
La inmobiliaria del alcalde tampoco abonó a Hacienda el impuesto de sociedades
El extenso expediente que la Agencia Tributaria remitió a la fiscalía y motivó su querella por fraude fiscal de 291.000 euros sostiene que el alcalde de Santiago, Gerardo Conde Roa, sí cobró a los clientes de su promotora el IVA que luego evitó pagar a Hacienda durante el ejercicio 2010.La denuncia que presenta el ministerio público detalla cómo el regidor compostelano “consciente, voluntariamente y con ánimo de defraudar a la Hacienda Pública” dejó sin declarar 291.289,43 euros del IVA correspondiente a la venta de 61 viviendas de protección oficial en Santiago, por las que su promotora Geslander Proyectos de Edificación SL, ingresó ese año 4.059.142 euros. La sociedad inmobiliaria —de la que Conde Roa es administrador único— solo declaró 9.521 euros de los 300.810 euros que le correspondía pagar. Con lo que Geslander adeuda 291.289 euros a la Agencia Tributaria.
La historia viene de lejos, según detalla la denuncia que el lunes aceptó a trámite el titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Santiago, José Antonio Vázquez Taín. Los primeros pasos de la inspección de Hacienda se remontan al 18 de marzo de 2011. La Agencia Tributaria intentó en vano y por dos veces notificarle las actuaciones al propio interesado que figuraba como “destinatario desconocido”. El 5 de mayo de 2011, 17 dias antes de las elecciones municipales que aúparon a Conde Roa a la alcaldía de Santiago, por fin Hacienda dio con Conde Roa y fijó una primera reunión para el 30 de mayo, cuando el dirigente del PP ya esperaba a tomar posesión en el gobierno local después de haber ganado las elecciones por mayoría absoluta. A partir de esa primera cita con los inspectores de la Agencia Tributaria, en la que se le comunicó la investigación en marcha, el alcalde de Santiago designó a un representante para que actuase en nombre de su promotora.
El alcalde evita aclarar si su sociedad pagó los impuestos
Tras concluir el expediente, oída la versión de Geslander, la Agencia Tributaria concluye no solo que eludió pagar 291.000 euros en concepto de IVA. También que dejó de pagar el impuesto de sociedades. Ese contundente informe de Hacienda movió al fiscal a presentar la denuncia en la que acusa al regidor compostelano de un delito contra la Hacienda Pública tipificado en el artículo 305 del Código Penal.
El ministerio público elige esa vía, dado que el presunto fraude supera los 120.000 euros, el límite a partir del cual la sanción pasa de multa administrativa a un delito penado con cárcel. Entre las diligencias que solicitó el fiscal está la declaración en calidad de imputado de Conde Roa, y que se cite como testigo al jefe de la Delegación Especial de la Agencia Tributaria en Galicia, José Manuel Rodríguez Orive, como responsable del expediente administrativo. Como medidas cautelares, el ministerio público solicitó además al juez que impusiese una fianza a Conde Roa de 400.000 euros para compensar deudas e intereses de Geslander con Hacienda. “Para el supuesto de que no se preste, procede embargarle bienes suficientes que cubran la candidad indicada”, señala la querella.
La Hacienda pública lo citó una semana después de los comicios locales
El juez Vázquez Taín obvió esas dos peticiones de fiscal y simplemente acordó la imputación del regidor compostelano, quien ayer decidió no darse por enterado. Tras “conocer la noticia por un periódico”, acudió a una rueda de prensa que ya estaba prevista junto a dos diputados coruñeses para explicar los Presupuestos del Estado para la provincia. Después de vender las bondades de las cuentas de Rajoy para la ciudad, se quedó solo y fue respondiendo uno por uno a todos los periodistas sobre el caso. Pero no aclaró la cuestión fundamental: sí pagó los correspondientes impuestos por la venta de las 61 viviendas. Se escudó en que no había recibido aún el texto de la denuncia. “No puedo pronunciarme sobre algo que no conozco”, comenzó su defensa. Ni siquiera quiso aclarar si, tal y como consta en el informe de Hacienda, se reunió en mayo de 2011 con los inspectores para tratar este tema.
El fiscal lo acusa de no haber pagado tampoco el impuesto de sociedades
“Tranquilo, pero un poco decepcionado” dijo para definir su actual situación como “un poco diabólica”. “Cuando yo ejercía de abogado, las reglas de juego eran otras distintas. No era pensable que un medio lo publicase antes de que el querellado recibiese la notificación”, se quejó. “Confío absolutamente en la justicia y cuando lo haya analizado tendré que adoptar las medidas oportunas”, apuntó. Lo que sí dejó claro el regidor es que continúa como administrador único de Geslander aunque puntualizó que no está en el día a día de la gestión. “Sigo siendo el administrador porque no podía dejar de serlo. Es una sociedad limitada unipersonal”, argumentó. El alcalde afirmó que la empresa “no tiene actividad” desde hace cinco años, en 2007, momento en el que retomó su carrera política como candidato del PP en Santiago. Y se comprometió a dar explicaciones cuando le sea notificada la denuncia por el juzgado. Se despidió asegurando que no piensa “seguir alimentando” el tema.
¿Ha defraudado?, le preguntaron. “Depende de cómo lo computen”
Solo una hora después, en una entrevista en la Cadena SER, el alcalde se permitía ir un poco más lejos con sus repuestas. Con calculada ambigüedad, intentó formular una teoría que se escapase del sí o no. “¿Ha dejado de declarar los 300.000 euros?, le preguntó el periodista. “Pues no se lo puedo decir. Como no tengo los datos y no sé a qué se refiere [la querella] Pueden ser 300, uno o 50”, respondió. Ante la insistencia en las preguntas, Conde Roa proclamó: “El problema no es si se ha pagado el IVA o no. Ese es el reduccionismo al que no se puede llegar”. “¿Ha defraudado a Hacienda?”, volvió a repreguntar el entrevistador. “Depende de cómo se computen, depende de en qué momento se haya efectuado. De todos los factores que hay que conocer para saber cuál es la base de la querella”. Esa fue toda la explicación que ofreció Conde Roa. Y que luego, ya por la tarde, fue repitiendo en diversos medios de comunicación.
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