Sillas que se ordenan solas a golpe de palmada

Parece cosa de algún personaje infantil, como Mary Poppins, eso de ordenarle a los objetos que se recojan solos dentro de una habitación. El fabricante de automóviles Nissan lo ha conseguido, al menos con sillas de oficina, al tiempo que pretende demostrar las bondades de su sistema de aparcamiento automático de vehículos. La idea consiste en dotar a las sillas de una sala de reuniones de un sistema similar al de los coches capaces de aparcarse a sí mismos. Basta que alguien aplauda una vez para que las sillas, desordenadas en una habitación, se acerquen a la mesa y se ordenen perfectamente en torno a ella. 

El sistema emplea una red de cámaras que mapean el espacio de la habitación de manera similar a cómo un vehículo dotado de sensores se ubica en el espacio donde aparcarse. Dotadas de la capacidad de desplazarse con todos los grados de libertad hacia adelante y atrás y a derecha o izquierda, las sillas son capaces de dibujar la trayectoria óptima desde donde se las ha ubicado al lugar más cercano en la mesa de reuniones. Además, pueden rotar sobre sí mismas para que los respaldos se mantengan perfectamente paralelos al borde de la mesa.

Nada parece indicar que Nissan quiera lanzarse al diseño de mobiliario de oficina inteligente. Al contrario, la funcionalidad de las sillas, más allá de una idea para un nuevo producto, forma parte de una campaña de marketing que muestra de una manera original la eficacia en encontrar plaza de aparcamiento y ubicarse dentro de él de los vehículos de la marca japonesa.