EE UU cierra una página que ofreció 'La venganza de los Sith' seis horas antes de su estreno

El sitio de Internet Elitetorrents.org, en el que hasta ayer podían encontrarse enlaces desde los que descargar películas a través de la red de intercambio de archivos BitTorrent, ha sido cerrado por las autoridades de EE UU después de haber sido denunciada por Hololywood. Entre otros filmes sujetos a la ley de propiedad intelectual, daba acceso al último capítulo de La Guerra de las Galaxias que pudo descargarse por esta vía seis horas antes de su estreno en salas comerciales de todo el mundo.

La ayuda para acceder a la última entrega de la saga creada por George Lucas ha sido el desencadenante de una operación en la que han sido emitidas órdenes de detención contra 10 personas. Además, han sido confiscados los servidores desde los que se gestionaban la actividad del sitio y el intercambio de ficheros.

La redada estaba dirigida a los individuos conocidos como "primeros proveedores", o a aquéllos que colgaron en la red el material sujeto a los derechos de propiedad intelectual. Los investigadores no dieron detalles concretos sobre el lugar donde se produjo la operación, llamada "D-elite", pero dijeron que se llevó a cabo en coordinación con agentes federales de Arizona, California, Illinois, Kansas, Ohio, Pensilvania, Texas, Virginia y Wisconsin.

Estos casos son considerados un problema preocupante por Hollywood y las discográficas, pues películas y discos muy esperados empiezan a llegar antes a la Red que a los cines o las tiendas. La consecuencia en el caso de La venganza de los Sith fue que en 24 horas más de 10.000 copias de la película fueron intercambiadas entre socios de Elite Torrents - unos 133.000 según las autoridades estadounidenses- y usuarios de la red de BitTorrent. Según los investigadores esta red distribuyó en los últimos meses 17,800 títulos -incluyendo música, cine y programas informáticos-, los cuales habrían generado, según las mismas fuentes, hasta 2,1 millones de descargas.

Localizadores de ficheros

BitTorrent es una tecnología cada vez más utilizada para intercambiar rápidamente canciones, vídeo-juegos y software además de películas que, en algunos casos como el de La venganza de los Sith, podían obtenerse antes de que se estrenasen en los cines. Se trata de una red descentralizada en la que los archivos se almacenan en los ordenadores de los usuarios. Para localizarlos se recurre a los buscadores tradicionales y a sitios denominados trackers, en los que se realiza un seguimiento de los ficheros disponibles y se aporta información sobre donde encontrarlos.

La página de Elite Torrents era un tracker, una de esas webs que publica enlaces a los contenidos disponibles en las redes de intercambio, lo que ha motivado su cierre por parte de las autoridades estadounidenses. Hoy el dominio se encuentra ya inactivo pero diversas fuentes informan de que tras la clausura del sitio este mostró durante algunas horas un mensaje del FBI alertando sobre las consecuencias de violar las normas que protegen los derechos de autor.

Los piratas "no podrán esconderse tras la tecnología"

Los agentes federales a cargo de la operación han explicado que ésta es la primera acción que llevan a cabo contra la popular tecnología de intercambio de ficheros de "usuario a usuario" (P2P). "Las acciones de hoy envían el claro e inequívoco mensaje de que cualquiera que esté relacionado con el robo 'online' de trabajos sujetos al derecho de propiedad intelectual no puede esconderse detrás de la nueva tecnología", señaló John Richter, asistente del fiscal general del Departamento de Justicia de Estados Unidos.

La operación contra EliteTorrents llega seis meses después de que la MPAA, la asociación que reúne a los principales estudios cinematográficos de Estados Unidos, siguiese los pasos de las discográficas y comenzase a denunciar a usuarios individuales por compartir ilegalmente películas.

Al margen de estas acciones legales, ambas industrias están presionando al Congreso estadounidense para que apruebe leyes que limiten la piratería en Internet. El presidente Bush ha firmado recientemente una ley por la que las personas que distribuyan contenidos protegidos antes de su llegada al mercado podrían ser condenadas a hasta diez años de prisión.