La venta de videojuegos pierde vigor tras las cifras récord de 2003
Las ventas de videojuegos ascendieron hasta la cifra récord de 15.030 millones de euros, pese a que se han terminado los días de fuerte crecimiento ya que los jugadores esperan una nueva generación de consolas en 2005 y 2006, según muestra el estudio anual del grupo de investigación Screen Digest, presentado hoy.
Recientes reducciones de precios en Europa en la Xbox de Microsoft y la PlayStation 2 de Sony junto a nuevas ediciones de franquicias con buen nivel de ventas como Grand Theft Auto, Halo y Doom impulsarán las ventas en la segunda mitad del año, según apuntan las previsiones. Sin embargo, se espera que las ventas de todo el año sean menores a las de 2003, de 15.030 millones de euros. Screen Digest apunta que la reducción del volumen de ventas había sido prevista desde hacía tiempo y que seguía la clásica tendencia para consolas de videojuegos que cumplían su tercer y cuarto año en las tiendas. "La cima fue 2003. Pero la desaceleración para equilibrar el crecimiento en 2004 es positiva. Hubo muchas más consolas vendidas en este ciclo que en el pasado", ha señalado Ben Keen, director ejecutivo de Screen Digest.
Fuerte crecimiento
Durante la pasada década, la tasa de crecimiento para las ventas de videojuegos había explotado, rivalizando con las recaudaciones de taquilla en el cine y la venta de CDs en varios de los mercados más importantes.
Screen Digest ha definido la situación del mercado en su informe anual incluyendo videojuegos para ordenadores personales y consolas como PlayStation 2, Xbox y GameCube de Nintendo, junto a títulos "educacionales", o el software híbrido a caballo entre la educación y el entretenimiento. El crecimiento de las ventas globales de videojuegos en 2003 estuvo liderado por Europa, y particularmente por Gran Bretaña. El mercado británico de videojuegos, el tercero del mundo por detrás de Estados Unidos y Japón, creció casi un 20% a 1.880 millones de dólares (1.550 millones de euros).
Screen Digest predijo que las ventas globales al por menor aumentarán a más de un 16% hasta 17.420 millones de euros.
