Un invento japonés transforma las flores en altavoces
Let's comenzar a vender el ingenio en agosto, a un precio de entre 46 y 460 dólares
La gente a la que le gusta hablar a las plantas puede disfrutar a partir de ahora de un acompañante musical, gracias a un invento japonés que convierte los pétalos y hojas de las flores en altavoces. Los "altavoces de flores" son un artilugio fabricado por Let's que se esconde en una maceta o una planta a la que se puede conectar un reproductor de DVD o una radio.
Con este ingenio es posible "escuchar música en cualquier lugar", y se trata de una tecnología que "está integrada a un ambiente natural", según ha afirmado Hirohiko Okugawa, directivo de Let's, refiriéndose a los lugares de ubicación del nuevo aparato, del que se espera tenga gran éxito en pasillos de hoteles y hospitales.
Por su parte, el inventor del dispositivo, Keiji Koga, asegura que su creación permite que definitivamente seamos "capaces de disfrutar de las plantas y las flores con la totalidad de nuestros cinco sentidos". Según Koga, la música también es buena para las plantas, que adquieren una mayor fortaleza y esplendor con las vibraciones constantes de la música.
La empresa japonesa tiene previsto comenzar a vender estos altavoces a mediados de agosto a un precio de entre 5.000 y 50.000 yenes (46 y 460 dólares), dependiendo del tamaño de la planta. Aunque Let's ha diseñado el sistema para que la fuente del sonido y la energía eléctrica lleguen desde fuera del invento, la empresa planea ya crear modelos de flores con la fuente de alimentación y radio FM incluidas.
Según explica la publicación científica New Cientist, para que emitan sonido las flores son introducidas en un tubo de acrílico que además contienen una esperial de material magnetizado y otros componentes oscilantes. Cuando se aplica una corriente alterna el tubo y las flores vibran a una muy alta velocidad, produciendo sonidos audibles.
En todo caso, hay expertos que no creen que el sistema funcione correctamente. Es el caso, por ejemplo, de Stanley Lipshitz, un investigador de la Universidad de Ontario especializado en temas de sonido que señala en esta revista científica que en los altavoces lo que vibra suele ser un material rígido, por lo que usar algo flexible para este fin, como una planta, puede ser muy poco efectivo. "Evidentemente, si haces vibrar cualquier cosa en una frecuencia sonora obtendrás un sonido", afirma, "pero desconozco cual será su calidad".
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