El balance de violencia sexual de San Fermín deja 16 denuncias por abusos y una por violación

Una denuncia por violación y 16 por abusos sexuales. Ese es el balance en cuanto a violencia sexual de San Fermín este año, el primero postpandemia en el que se han podido celebrar estas fiestas que han acogido en Pamplona a más de 400.000 personas durante ocho días y medio. El alcalde, Enrique Maya, en el balance final este viernes, ha lamentado entre todo lo ocurrido las 16 denuncias por abusos (tocamientos), frente a las 10 de 2019, y la agresión sexual con penetración ocurrida el pasado sábado por la noche.

En trece de esos casos, ha dicho Maya, “los presuntos agresores han sido identificados y detenidos”. En el caso de la agresión, el agresor se entregó a la Policía Foral el miércoles y quedó en libertad horas después mientras se procede a la investigación. Desde 2016, cuando se produjo el caso de La Manada, la atención mediática, social, política y policial está de forma especial sobre este tipo de violencia machista que deja al año en España más de 10.000 mujeres víctimas de delitos sexuales, según el Ministerio del Interior.

El pasado sábado, en uno de los días con más personas abarrotando Pamplona durante San Fermín, se produjo la que hasta ahora es la única violación denunciada de las fiestas navarras. En el barrio del Mendillorri, al este de la ciudad, un hombre agredió sexualmente a una mujer. Ella interpuso una denuncia. El miércoles, el presunto agresor, de otra comunidad autónoma, se entregó a la Policía Foral y quedó en libertad horas después, cuando la magistrada del Juzgado de Instrucción número 3 de la capital decretó esa salida, con una orden de alejamiento de 200 metros de la víctima y la prohibición de comunicarse con ella.

El lunes, fue el Ayuntamiento de Pamplona quien confirmó la denuncia por agresión. Su alcalde, Enrique Maya, explicó que se había tratada “de una agresión sexual con penetración”. Todos los grupos políticos publicaron una declaración institucional conjunta en la que manifestaban su “total rechazo y condena a esta agresión sexista”, decía ese documento.

Un día después, el martes por la tarde, el movimiento feminista, el social y la ciudadanía de la ciudad se concentraron en la Plaza del Castillo. “El protocolo de respuesta ante las agresiones es rápido y eficaz”, afirmó el martes Iratxe Álvarez, portavoz de la Plataforma de Mujeres contra la Violencia Sexista, una de las organizaciones convocantes de esa concentración pitada a ese tipo de agresiones. En el acto participaron las asociaciones feministas, las peñas de la ciudad, el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, o el vicepresidente del Gobierno foral, Javier Remírez.

En el marco de las fiestas, tienen también constancia de una decena de denuncias por pinchazos con jeringuillas. En un primer momento se temió que estas personas pudieran haber sido víctimas de un intento de sumisión química. No obstante, no se ha detectado en su organismo sustancias inhibidoras de voluntad ni de ningún otro tipo, lo que, expresa el portavoz de Policía Foral, Mikel Santamaría, “tranquiliza” a las autoridades.

Sí reconocen que hubo casos de personas que tras el pinchazo sintieron mareos, por lo que están a la espera de los análisis de contraste que se están realizando en Madrid y que podrían arrojar algo de luz sobre si esas jeringuillas contenían o no alguna sustancia. Mientras, siguen investigando para hallar al o a los culpables: “Están todas las hipótesis abiertas, desde que pueda ser gente dedicada a este tipo de modalidad delictiva, lo que tendría una segunda fase de agresiones sexuales o de robos con intimidación, hasta que pueda ser una persona con un problema mental o una gamberrada”, detalla Santamaría.

Por ahora, se sabe que todos los pinchazos han sido denunciados en el casco urbano y que las víctimas no se ajustan a un perfil concreto, sino que hay “hombres, mujeres, extranjeros, nacionales... El elenco es muy abierto”, apunta.