El Dalai Lama recibe el alta tras ser hospitalizado por una infección pulmonar
El líder espiritual tibetano, de 83 años, fue ingresado el pasado martes en Nueva Delhi
El Dalai Lama, líder espiritual tibetano de 83 años, ha recibido el alta este viernes después de permanecer tres días hospitalizado en la capital de India, Nueva Delhi, por una infección pulmonar, según ha informado su secretario de prensa. El Dalai Lama había regresado a Dharamsala el lunes tras celebrar varias reuniones en la capital india durante el domingo, cuando "comenzó a sentir algunas molestias". Tenzin Gystaso, decimocuarto dalai lama, máxima figura religiosa del budismo tibetano, se ha recuperado de la infección que padecía, según ha informado su representante.
Aunque sigue siendo un orador extraordinariamente popular, el Dalai lama ha reducido bastante sus compromisos internacionales, y no se ha reunido con ningún líder internacional desde 2016, según informa AFP. Diversos Gobiernos han admitido reticencias a invitarlo por temor a generar tensiones con China. China asegura que Tíbet es parte integral de su territorio y lo ha sido durante años. Pekín también señala que su Gobierno puso fin a la servidumbre y llevó prosperidad a lo que era una región atrasada y que respeta plenamente los derechos del pueblo tibetano. Pekín insiste en que el Dalai Lama es un "separatista" con túnica de monje y pidió a los líderes extranjeros que no se reunieran con él, ni siquiera a título personal.
El refugio tibetano de Dharamshala
Hacia finales de marzo del 1959, el Dalai Lama –nacido Lhamo Dondhup el 6 de julio de 1935 en Taktser, en el Tíbet oriental– cruzaba a salvo la frontera con India y se asentaba en Dharamshala, donde creó la Administración Central de Tíbet (CTA), también conocida como el Gobierno tibetano en el exilio, lugar donde refugiados y simpatizantes de la causa recuerdan una revuelta que fue oprimida con decenas de miles de tibetanos asesinados a manos de las tropas chinas. “Dejad que reunamos al Dalai Lama con los tibetanos dentro de Tibet, quienes han pasado los últimos 60 años con la esperanza y el sueño de ver al Dalai Lama en toda su vida”, concluyó Lobsang Sangay, 'sikyong' (regente) del CTA, en su discurso oficial el pasado 10 de marzo ante delegaciones de países europeos reunidas en Dharamshala para conmemorar el levantamiento.
En 2011, el Dalai Lama renunció a su papel como representante político del pueblo tibetano y Lobsang Sangay fue elegido democráticamente el máximo dirigente del gobierno de Tíbet en el exilio. Antes, a finales de 1970, Tenzin Gystaso, entonces aun líder político y espiritual del Tíbet, varió la postura oficial y pasó de reclamar la independencia a pedir la “autonomía genuina” de la región como parte de China. La decisión coincidió con el enfriamiento del yugo chino, permitiendo el exilio de centenares de tibetanos fuera de la región administrada por China. Una década más tarde, el Dalái Lama fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz por su defensa de la libertad de su pueblo "oponiéndose sistemáticamente a la violencia".
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