Una nueva prueba descarta que la religiosa repatriada tenga ébola
Juliana Bonoha continuará ingresada en el hospital Carlos III. Liberia pide ayuda a España
El hospital madrileño de La Paz ha descartado este jueves que Juliana Bonoha Bohé, la religiosa española de 65 años repatriada desde Liberia con el padre Miguel Pajares, esté contagiada de ébola. Bonoha "no presenta sintomatología de la enfermedad", según el parte facilitado por el hospital, que indica que el segundo test realizado en el centro ha sido negativo. La religiosa "se encuentra con buen estado general y estable hemodinámicamente", añade el documento.
Los resultados del último test de la religiosa se conocen el mismo día que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha revelado que la presidenta de Liberia, Ellen Johnson-Sirleaf, ha pedido ayuda a España ante la situación que atraviesa este país. "Me pidió ayuda, me dijo que estaban muy necesitados", ha asegurado Rajoy, que ha dicho que le prometió la ayuda, consistente en medicinas para evitar, en lo posible, que se siga propagando la enfermedad.
La religiosa permanece ingresada en la sexta planta del hospital público Carlos III de Madrid. Estará en observación "hasta que transcurra el periodo de incubación de 21 días" que fija el protocolo de aislamiento establecido por el centro hospitalario. Ese periodo se cumple el próximo 28 de agosto, cuando previsiblemente será dada de alta. El virus, que acabó con la vida de su compañero de viaje, lleva ya más de un millar de víctimas en África desde que se desató la última epidemia el pasado marzo.
Bonoha, de origen ecuatoguineano, permanece desde el 7 de agosto ingresada y aislada en el hospital Carlos III de Madrid, un centro del que fueron trasladados todos los pacientes para acoger a los dos religiosos. La hermana dio negativo en la primera prueba que se realizó en Liberia. Cuando llegó a Madrid el pasado día siete, superó un segundo test, aunque se le diagnosticaron fiebres tifoideas, y ésta es la tercera ocasión en la que se constata que está libre de la patología.
Miguel Pajares, de 75 años, falleció el martes a consecuencia del virus del ébola, que contrajo mientras cuidaba al director del hospital católico de San José de Monrovia, Patrick Nshamdze, que cayó enfermo, aunque las primeras pruebas no detectaron el contagio por el virus.El religioso, primer enfermo con ébola fallecido en Europa
Fue despedido en un funeral multitudinario el miércoles.
En los últimos días han muerto en Monrovia dos compañeros de Pajares, George Combey y Chantal Pascaline, que trabajaban con él en el hospital católico que ha sido cerrado. La orden está pendiente de la salud de la hermana Paciencia Melgar, también contagiada por el virus.
El personal, 21 días en observación
Tras el fallecimiento de Pajares, el miércoles comenzaron las labores de limpieza y biodescontaminación de la estancia que ocupaba, de los conductos de ventilación y de los equipos médicos instalados en el área, en aplicación de la normativa vigente establecida por la Organización Mundial de la Salud, según informa La Paz en su comunicado. El sistema para la biodescontaminación recibe el nombre de VHP (tecnología con vapor de peróxido de hidrógeno), que genera vapor seco de alta potencia que mata los microorganismos en un plazo de "cinco o seis horas", según explicaban los responsables de la empresa que se ha hecho cargo del proceso.
"Una vez finalizada la fase de descontaminación, está garantizada al 100 % la seguridad de todo el entorno", señala el centro sanitario. El personal que ha atendido al paciente infectado por el virus del ébola pasará 21 días en periodo de observación a contar desde el fallecimiento de Pajares el pasado martes. El periodo cumpliría el 1 de septiembre. El riesgo de contagio "es prácticamente nulo", según el centro hospitalario, que señala que las medidas de control son tomar la temperatura corporal dos veces al día y alertar en caso de superar los 38º. Los trabajadores no han sido sometidos a análisis para detectarles la enfermedad, frente a lo que dijo el miércoles el consejero de Sanidad, Javier Rodríguez, que ha rectificado 24 horas después.
El Gobierno pide ayuda a Europa para los países afectados
El Gobierno español ha solicitado a la jefa de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton, que incluya el riesgo ante la epidemia de ébola que asola África Occidental entre los principales asuntos a tratar en la cumbre extraordinaria de ministros de Exteriores de este viernes, informa Ignacio Fariza. Aunque el encuentro estaba inicialmente previsto para tratar los conflictos de Irak, Gaza y Ucrania, fuentes comunitarias han confirmado este jueves que Ashton ha aceptado su inclusión en la agenda definitiva, pero remarcan que el tiempo será “escaso” y aún no es seguro que las conclusiones formales incluyan una mención sobre este asunto.
La semana pasada, el Ejecutivo comunitario reiteró por boca del comisario de Salud, Tonio Borg, que la exposición de los países europeos al virus es "extremadamente baja" y señaló que, en el "improbable" caso de que el virus alcanzara a los Veintiocho, los Estados miembros estarían "preparados para hacerle frente".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.