Gipuzkoa estudia trasladar parte de la basura orgánica a una planta en Francia

La Diputación de Gipuzkoa, gobernada por Bildu, estudia trasladar parte de las basuras orgánicas que se generan en la provincia a una planta de tratamiento de residuos en Itxassou, Francia. El responsable de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la institución foral, Juan Carlos Alduntzin, ha anunciado la decisión ante "la situación de colapso", en la que se encuentran las instalaciones de Lapatx, en Azpeitia. Aunque la medida sea una solución temporal —"no es definitiva", aclaró Alduntzin— parece que gana visos de convertirse en realidad, ya que, según explicó el representante socialista en el Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK, en sus iniciales en euskera), Denis Itxaso, la Diputación ha pedido formalmente al Departamento de Medio Ambiente vasco que autorice el traslado de residuos.

Alduntzin, acompañado de la directora de Medio Ambiente del territorio, Ainhoa Iraola, subrayó que la decisión se sustenta en "los serios problemas" que presenta el tratamiento de la basura en Gipuzkoa y a "la pésima gestión realizada por los anteriores gestores de GHK", en referencia al órgano público del que depende esta materia. El organismo en la pasada legislatura estuvo controlado por el PNV y Hamaikabat, impulsores también de la construcción de una planta de tratamiento de residuos en Zubieta, un proyecto sobre el que la Diputación de Gipuzkoa sigue sin pronunciarse, a pesar de que Bildu pedía en su programa electoral una "moratoria" del mismo para estudiar otras alternativas.

El responsable de Medio Ambiente de la Diputación guipuzcoana también anunció que se va a acelerar la construcción de una planta de compostaje en Bergara, una instalación, según recordó, "que aún estando prevista no ha sido desarrollada por los anteriores gestores".

Alduntzin cargó contra Itxaso, quien denunció la semana pasada el coste de trasladar las basuras. "Francia está un poco más lejos que Itxassou, que está en Lapurdi", afirmó con sorna el representante foral, "los kilómetros que van a viajar los residuos son tres kilómetros desde [el vertedero] de San Marcos a Itxassou o Lapatx", ahondó.

Itxaso, por su parte, aseguró que "no se trata de la distancia a recorrer, me da igual que hablemos de Francia o de Bizkaia. El problema es la falta de gestión de residuos. Es un sinsentido", argumentó". El representante socialista además añadió que existe una "reglamentación europea que dicta que cada territorio se tiene que autogestionar en materia de residuos", por lo que exigió al gobierno de Bildu que "no se alarguen las inversiones previstas".