Salud concentrará los accidentados graves en hospitales de Barcelona

Los ajustes de la Generalitat en sanidad pública han forzado al Departamento de Salud a reorganizar el sistema de atención para los pacientes de accidentes que derivará los afectados más graves a hospitales del área metropolitana de Barcelona. El resto de centros de Cataluña que hasta ahora también tenían capacidad de atender también a estos accidentados -el hospital Arnau de Vilanova, el Joan XXIII de Tarragona y el Josep Trueta de Girona-, solo tendrán capacidad para dolencias leves y otros casos que requieran neurocirugía.

"Es un ejemplo de cómo ganar eficiencia sin tener que ampliar el presupuesto", ha subrayado el consejero de Salud, Boi Ruiz, este mediodía en la presentación del nuevo plan. Ruiz ha desvinculado esta nueva organización del plan de ajustes de la Generalitat sobre el sistema público y ha asegurado que solo responde a "criterios clínicos". Los sindicatos, sin embargo, advierten que esta reorganización cuadra con el ahorro que Salud pretende aplicar a los centros de referencia de Girona, Tarragona y Lleida. "Tras los recortes ya no están preparados para atender casos de accidentados graves", ha advertido un portavoz sindical de UGT.

Los nuevos hospitales de referencia para accidentados graves son los de Vall d'Hebron, Bellvitge, Clínic, Sant Pau y el Parc Taulí, todos en Barcelona a excepción el último, que se halla en Sabadell, localidad ubicada también en la corona metropolitana de Barcelona. Estos serán los centros sanitarios a partir de ahora para tratar casos que requieren intervenciones complejas como la atención a quemados o las lesiones medulares. Los casos pediátricos, por su parte, se atenderán en el hospital Vall d'Hebron, el Sant Pau y el Sant Joan de Déu, todos en Barcelona.

La medida forma parte de la reorganización de Salud del código politraumático con el que pretende reducir el tiempo que tardan estos pacientes en recibir la atención necesaria y adaptarlos a los ajustes que la Generalitat ha aplicado en sanidad pública: casi mil millones de euros, el 10% del presupuesto, que ha provocado el cierre de camas, quirófanos y la reducción de turnos y guardias del personal en todos los centros públicos.

Mejor coordinación entre ambulancias y hospital

La rápida intervención de los sistemas de urgencias y el traslado al centro hospitalario para dar respuesta a los pacientes supone un papel clave para la supervivencia de las víctimas de accidentes, tercera causa de mortalidad entre los menores de 35 años. En los casos en los que se produce un segundo traslado hospitalario tras el primer ingreso aumenta la mortalidad hasta un 25%, ha destacado Ruiz. Cada año se producen en Cataluña unos 2.900 traumatismos graves, la mayoría provocados por accidentes de tráfico.

Este nuevo modelo es un mecanismo de coordinación que se articula alrededor del servicio de ambulancias y transporte médico urgente del Sistema de Emergencias Médicas (SEM). Este organismo es el responsable de practicar la primera atención médica en el sitio donde ha ocurrido el accidente, valorar los recursos médicos que precisa cada paciente y coordinarse con el hospital del traslado para que el centro se prepare para intervenir rápidamente. "Pretendemos ser más sensibles al factor tiempo", ha destacado el director general del SEM, Francesc Bonet, tras añadir que el plan se basa en la mejora de comunicación y coordinación entre los servicios de emergencias y el hospital.

El nuevo modelo desplegará en toda Cataluña unas 400 unidades de asistencia y cuatro helicópteros medicalizados con base en Tremp (Lleida), Girona, Sant Cugat del Vallès (Barcelona) y Móra d'Ebre (Tarragona).