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Juan Luis Cebrián, condecorado en República Dominicana por su aportación a la cultura

El consejero delegado de PRISA homenajea a la figura política y literaria del ex presidente dominicano Juan Bosch

La figura política y literaria del ex presidente dominicano Juan Bosch, cuyo centenario del natalicio se está celebrando este año, fue la protagonista de la conferencia dictada anoche por Juan Luis Cebrián, consejero delegado de PRISA, en el Palacio Nacional de República Dominicana. Minutos antes, el actual mandatario, Leonel Fernández, le había impuesto la Orden del Mérito Duarte, Sánchez y Mella en Grado de Comendador, por sus merecimientos y aportes a la cultura. "En el futuro haré lo necesario para hacerme merecedor de esta condecoración", dijo Cebrián tras mencionar su amistad entrañable y admiración por el país caribeño.

Para la ocasión, ministros, empresarios, intelectuales y periodistas coparon las sillas colocadas en el Salón de Embajadores de la casa de Gobierno. También asistieron miembros de la directiva del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), fundado por Juan Bosch una vez decidió abandonar su otra criatura política, el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), con el que había llegado a la presidencia del país después de ganar las primeras elecciones celebradas tras la muerte del dictador Rafael Leonídas Trujillo, en 1963.

La conferencia Juan Bosch se convirtió en un reconocimiento al extinto líder que trató de romper con lo que Cebrián llamó la "arritmia histórica" dominicana cuando subió al poder de manera efímera. Antes de ser derrocado por un golpe militar, Bosch "hizo aprobar una nueva constitución y una reforma agraria que no pudo llevar a cabo. Esos fueron sus primeros pasos para solucionar males no exclusivos del país, sino de América Latina, como la falta de institucionalidad democrática, corrupción, vulneración de derechos humanos y tributo a la violencia como forma de hacer política", dijo el directivo de PRISA. "Muchos de ellos están superados ya felizmente en muchos países de la zona".

El fundador y primer director de EL PAÍS, hizo varias alusiones a los devenires históricos de España y de la República Dominicana para explicar cómo los procesos liberales vividos en la primera no llegaron a darse de igual forma en la segunda. Y en más de una ocasión, con referencias a Juan Bosch, mencionó la ausencia de una "burguesía de clase media que impulsara el capitalismo" y provocase los cambios que ameritaba su país. Por eso la arritmia que intentó romper un líder al que Cebrián describió como "gran visionario, de gran honradez y denunciante de la corrupción", que contribuyó al proceso de desarrollo político y social de la República Dominicana desde su demostrado convencimiento democrático y su fe en la figura de la ciudadanía.

Juan Luis Cebrián también destacó el conocimiento que Bosch tenía de su pueblo, de sus costumbres, de su cultura, gracias a su contacto con el campesino pues, aunque "era gente sin educación, poseía un espíritu solidario, principios morales sólidos, gran solidaridad y gran sensibilidad social". Pero había quien no lo veía así, y tenía al hombre del campo como arisco y pícaro, sembrador de revoluciones y protestas".

Según Cebrián, Bosch tenía muy claras las razones políticas y sociales por las que República Dominicana vivía en el atraso después de la dictadura de Trujillo, pero "la violencia de las oligarquías unidas a la geopolítica, que él tildó de pentagonista, no le dieron tiempo ni a fracasar, quizás porque intuían que hubiese sido victorioso".

En la parte final de su exposición, Cebrián se refirió a Bosch el literato, un gran amante de su lengua, que usó con corrección y defendió con rigor. Esto le sirvió para resaltar la importancia del español en un mundo globalizado como el de hoy. "Su doctrina sigue vigente puesto que libertad y justicia social siguen en el meollo de cualquier programa avanzado. Nos dejó en sus libros y artículos el legado de alguien enamorado de su lengua. Y no existe en el mundo un idioma como el nuestro, que es un acervo formidable en el mundo globalizado de hoy. Somos dueños de una cultura global basada en el uso del español", afirmó.

Juan Luis Cebrián, tras recibir la Orden del Mérito Duarte, Sánchez y Mella en Grado de Comendador de manos del presidente de República Dominicana, Leonel Fernández
Juan Luis Cebrián, tras recibir la Orden del Mérito Duarte, Sánchez y Mella en Grado de Comendador de manos del presidente de República Dominicana, Leonel FernándezMIGUEL ÁNGEL PANTALEÓN

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