'Rosetta': encuentro cósmico un día antes de la final

Cientos de millones de personas en todo el mundo viven estos días con pasión el mundial de fútbol y esperan expectantes la final del domingo. Al mismo tiempo, un grupo de científicos algo más reducido, pero también de todo el mundo, cuentan los días igualmente electrizados por un motivo distinto: el día antes de la final, el 10 de julio, la nave de la Agencia Espacial Europea (ESA) Rosetta culminará una de las principales etapas de su largo viaje hacia el cometa Churyumov-Gerasimenko. Como pueden imaginar, en el Centro Europeo de Astronomía Espacial (ESAC), en Villanueva de la Cañada (Madrid), con una plantilla integrada por decenas de científicos e ingenieros de toda Europa y también de Estados Unidos, a la hora de comer se habla mucho más de fútbol que de ciencia.

El 10 de Julio Rosetta sobrevolará el asteroide (21) Lutetia. La nave se aproximará mucho al asteroide y obtendrá extraordinarias imágenes de alta resolución. Además, recabará datos sobre la composición de su superficie y de su entorno próximo. El sobrevuelo ha sido planificado al máximo detalle y todo está a punto para un encuentro exitoso entre nave y asteroide.

El grupo de Dinámica de Vuelo del Centro Europeo de Operaciones Espaciales (ESOC) de la ESA, en Darmstadt (Alemania), ha guiado a Rosetta de forma muy precisa hacia su objetivo, hasta el punto de que no serán necesarias algunas de las maniobras de corrección de órbita previstas inicialmente. Este grupo prevé que el máximo acercamiento tenga lugar a las 17:44:56.6 hora penincular, con un margen de error de 7.2 segundos y a una distancia de alrededor de 3160 kilómetros. La velocidad relativa a la que se cruzarán los dos cuerpos será de unos 15 kilómetros por segundo. Estas estimaciones se basan en observaciones de Rosetta tomadas desde tierra, y en la Campaña de Navegación Óptica, en marcha desde finales de mayo, con dos cámaras a bordo de la nave: la Cámara de Navegación y la cámara de ciencia, OSIRIS, que proporcionan imágenes del asteroide a intervalos regulares.

El Centro de Operaciones Científicas de Rosetta, en ESAC, ha definido el calendario de observaciones para los instrumentos en coordinación con los equipos responsables de cada uno de los instrumentos, con el objetivo de optimizar los retornos científicos. El Equipo de Operaciones de la nave, por su parte, ha enviado todos los comandos necesarios a Rosetta y los ha grabado en su memoria, así que la sonda podrá completar todo el proceso de aproximación y sobrevuelo de forma autónoma. No obstante, si hiciera falta podemos intervenir y actualizar los planes en cualquier momento.

La campaña de observaciones del sobrevuelo comenzó formalmente el pasado 5 de julio, cuando se encendió el instrumento a bordo de la nave que iniciará la toma de datos, el espectrómetro ultravioleta Alice.

Lutetia, el nombre con que los antiguos romanos bautizaron a la actual París, es un asteroide razonablemente grande, de unos 134 Km, con una larga protuberancia -es decir, su forma no es esférica-. No ha sido visitado nunca por ninguna sonda. Ha sido clasificado como asteroide de tipo C, lo que indica que contiene compuestos primitivos de carbono. Pero también hay mediciones que lo situarían entre los asteroides de tipo M, de naturaleza más metálica y que han pasado, por tanto, por una historia evolutiva diferente.

Será verdaderamente emocionante el poder observar Lutetia desde tan cerca, especialmente con el instrumento Visual and Infrared Mapping Spectrometer, y poder aclarar su génesis y evolución. Los asteroides y los cometas son cuerpos muy primitivos, y su estudio proporciona mucha información sobre el pasado del Sistema Solar.

Además, nuestros amigos astrónomos de ESAC se las han arreglado para conseguir tiempo de observación con el telescopio espacial infrarrojo de la ESA, Herschel, coincidiendo con la etapa de máximo acercamiento entre Rosetta y Lutetia. Dispondremos así de observaciones privilegiadas en las longitudes de onda del infrarrojo lejano, desde un punto de vista distante y a la vez complementario.

Con el sobrevuelo de Lutetia cerramos otro capítulo de la historia de Rosetta. La nave, lanzada en 2004, ha sobrevolado ya el asteroide Steins, al que llegó a acercarse a sólo 800 kilómetros el 5 de septiembre de 2008. Lutetia es mucho mayor que Steins, por lo que en esta ocasión la sonda no se acercará tanto; si lo hiciera el asteroide cubriría todo su campo de visión, lo que plantearía problemas con el software de navegación.

Ahora podremos concentrarnos en el objetivo principal de la misión: la fase de acercamiento a un cometa. Rosetta se convertirá en la primera nave que siga muy de cerca a uno de estos objetos, al que enviará incluso un módulo de aterrizaje que se anclará a su helado núcleo. En enero llevaremos a cabo la primera de dos importantes maniobras de espacio profundo para sincronizar la órbita de Rosetta con la del cometa Churyumov- Gerasimenko, y en junio de 2011 haremos que la sonda duerma durante un largo período. En 2014 Rosetta despertará de su hibernación, preparada para tener a la vista, poco después, a nuestro cometa.

Gerhard Schwehm es el Jefe de Misión de 'Rosetta', en el Centro Europeo de Astronomía Espacial (ESAC) de la Agencia Espacial Europea, Madrid.