El Vaticano ultima su decisión sobre los Legionarios
El Papa ha escuchado a los inspectores, y la reunión sigue abierta hasta esta noche o mañana
El Papa Benedicto XVI ha visitado esta mañana por sorpresa a los cinco obispos que han realizado la visita pontificia (inspección) a los Legionarios de Cristo, durante la reunión que estos mantienen con el cardenal Tarcisio Bertone y otros altos miembros de la Curia para presentar su informe final al Vaticano.
El portavoz de la Santa Sede, Federico Lombardi, ha explicado que el encuentro en el que se decide el futuro de la poderosa congregación ha seguido después su curso normal ya sin el Papa, y que la reunión debe acabar esta noche o mañana: "En cuanto termine diremos en un comunicado cómo ha ido, pero de momento no sabemos siquiera cuánto durará; los asistentes se han dejado libre la mañana del sábado por si acaso".
El Papa escuchó las conclusiones de la investigación y las propuestas de los prelados para los Legionarios, informó Lombardi, que no reveló el contenido de la reunión, sometida a secreto pontificio, y a la que asisten también, explicó, los prefectos de las congregaciones para la Doctrina de la Fe y para el Clero, William Joseph Levada y Franc Rodè.
Las medidas que tome el Papa contra la congregación ultra-tradicionalista fundada por el mexicano Marcial Maciel (1920-2008) determinarán en buena parte el balance del pontificado de Ratzinger y son esperadas con gran interés porque pueden influir también, de forma colateral, en el proceso de beatificación de su antecesor, Juan Pablo II.
Lombardi ha anunciado que el Papa se tomará todavía unos días de reflexión para decidir, aunque fuentes vaticanas dan por seguro que acometerá una "profunda limpieza" de la Legión. Las medidas podrían incluir, añaden esas fuentes, el cese de la actual cúpula dirigente, la refundación de la congregación con un nombre distinto y la designación de un comisario pontificio que gestionaría la Legión durante la etapa de cambio.
Los cinco obispos visitadores, nombrados por el Papa el 15 de julio de 2009, son Ricardo Watty, de Tepic (México); Ricardo Blázquez, arzobispo de Valladolid (España); Ricardo Ezzati, de Concepción (Chile); Charles J. Chaput, de Denver (EEUU), y Giuseppe Versaldi, de Alessandria (Italia).
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