La coordinadora de universitarios rechaza que los repetidores paguen tasas mucho más caras

La Coordinadora de Representantes de Estudiantes de Universidades Públicas se opone "tajantemente" a cualquier subida de tasas. El documento para una nueva financiación presentado por el Gobierno propone que los repetidores paguen más. "No es posible plantear una reforma en el sistema de financiación de las universidades responsabilizando únicamente a los estudiantes del fracaso académico y de esa falta de excelencia, siendo necesario realizar previamente un análisis profundo de las causas, del que carece el documento que presenta el ministerio", dice la nota de la organización, que representa a los estudiantes de 18 universidades públicas. Y añade: "Nos oponemos tajantemente a la subida de tasas propuesta en el documento y a cualquier otra, por mínima que sea, que pueda plantearse. Entendemos que el método para aumentar la calidad de nuestras enseñanzas no pasa por incrementar las tasas que los estudiantes pagan, sino por mejorar las condiciones de los estudios universitarios en todos sus niveles; siendo fundamental tener un sistema de becas que asegure la igualdad de oportunidades".

También propone el documento del ministerio una mejora sustancial del sistema de becas y ayudas, así como la creación de un observatorio que asegure que el sistema responde realmente a las necesidades de los alumnos. Esas medidas las aplauden desde CREUP. Sin embargo, el texto también plantea que, según vayan creciendo las becas, se vaya incrementando el precio de la segunda y tercera matrícula de las asignaturas hasta pagar en 2015 entre la mitad y total del coste real de los estudios (los alumnos pagan entre un 10% y un 12% de ese coste real, según distintas estimaciones). Así, por ejemplo, la asignatura más cara de la carrera de Derecho en la Autónoma de Madrid vale ahora la primera vez 80 euros, la segunda, 95 y la tercera, 135. Aplicándole los porcentajes planteados en el texto, en 2015 costaría en torno a 330 euros la segunda matrícula y la tercera, 660. Los criterios serán más laxos para los alumnos que compatibilicen el trabajo y el estudio, ya que les supone menos rendimiento.

Pero los alumnos no quieren oír hablar de subida alguna. "El ministerio debe replantear la propuesta de reforma del sistema de financiación del sistema universitario español y tener en cuenta muchos factores que no se han valorado en el documento presentado, pero los animamos a que sigan trabajando en un estudio serio y de rigor".