El gasto español en I+D alcanzó el 1,35% del PIB en 2008

El gasto español en I+D creció en 2008, aunque menos que en el año anterior (un 10,2% de incremento, frente a un 12,9% en 2007 respecto a 2006) con lo que se sitúa en un 1,35% del Producto Interior Bruto, aún por debajo de la media europea (1,85%), según la Estadística sobre Actividades en I+D que ha presentado el Instituto Nacional de Estadística (INE). En el primer desglose de las cifras se aprecia que el tirón del crecimiento registrado se debe, sobre todo, al sector público, cuyo gasto en I+D creció un 13,8%, mientras que el sector empresarial se quedó en un 8,3% de aumento. Los responsables del INE no pueden aventurar el panorama de 2009, ni mucho menos de 2010, por lo que habrá que esperar para conocer el impacto de la crisis económica y del recorte de inversión del Gobierno en este sector previsto en los presupuestos para el año que viene que actualmente discute el Parlamento. Los datos de 2008 indican una reducción del crecimiento pero es moderada, pese a que la crisis ya estaba presente en la segunda parte del año. Hay que tener en cuenta, matizó Fernando Cortina, subdirector general de Estadísticas de Empresas, del INE, que las actividades de I+D tienen una planificación considerable, por lo que no cabía esperar un impacto inmediato de los primeros envites de la crisis ya el año pasado.

En el gasto por comunidades autónomas, destacan por mayor esfuerzo Madrid, País Vasco, Navarra y Cataluña, "todas ellas con cifras de intensidad en el gasto superiores a la media nacional", afirma el INE. En cuanto a la tasa de crecimiento, fueron Castilla-La Mancha, Extremadura y Cantabria las que registraron mayor impulso en 2008. Por la cola, en porcentaje de gasto en I+D, están Ceuta y Melilla, Baleares y Canarias.

El sector empresarial ejecutó el 54% del gasto total de I+D, frente al 55,9% de 2007. Esto significa que fue el sector público el motor principal del crecimiento, lo que influirá en el panorama de este año y del que viene, si las empresas se mantienen en la misma tónica de esfuerzo de investigación y desarrollo, o incluso retroceden durante la crisis. Hay que tener en cuenta que los créditos que concede el Gobierno a las empresas, un capítulo que supera ya al de las subvenciones en el Ministerio de Ciencia e Innovación (más del 60% en los presupuestos proyectados para 2010) se contabilizan como inversión de las empresas, dado que este estudio estadístico, siguiendo normativas internacionales homologables, se refiere a la ejecución del gasto.

En el panorama Europeo, con el 1,35% del PIB de gasto en I+D, España se sitúa en el puesto número 13 de la UE de los 27, por debajo de Suecia, Finlandia, Austria, Dinamarca, Alemania, Francia, Bélgica, Reino Unido, Países Bajos, Luxemburgo, República Checa y Eslovaquia. En la UE de los 15, España ocupa el quinto lugar por la cola, sólo por encima de Irlanda, Portugal, Italia (datos de 2006) y Grecia. La media europea se sitúa en el 1,85% en 2008, frente al 1,91% del año anterior, quedando fuera del alcance el objetivo de Lisboa de situarse en el 3% en 2010. Igualmente inalcanzable queda el propósito español de llegar al 2% del PIB en inversión en 2011, máxime con el panorama presupuestario previsto para 2010.

Es notable el hecho de que entre 2004 y 2008 se ha invertido en España una cantidad equivalente a la inversión en I+D en los 12 años precedentes, destaca Cortina.