Finlandia construirá el primer almacén definitivo para residuos nucleares
Los desechos se introducirán en cápsulas de hierro cubiertas en cobre y se depositarán a 500 metros bajo tierra
Finlandia es el primer país de mundo que publica su disposición para construir un Almacén geológico profundo para el almacenamiento definitivo de residuos radioactivos de alta actividad. Así lo dio a conocer en la capital finlandesa la empresa Posiva. Por ahora dicha empresa lleva a cabo el almacenamiento de residuos de baja intensidad en el municipio de Eurajoki en la costa occidental finlandesa muy cerca de las centrales de nucleares de Olkiluoto.
Según la empresa, el sistema de almacenamiento será en cápsulas de hierro cubiertas en cobre y depositados a unos 500 metros de profundidad en una roca de granito. Según el delegado consejero de Posiva, Reijo Sundell, "los mecanismo de seguridad son tal, que la cápsulas no tendrán contacto alguno con el medio ambiente ni con el ser humano", La empresa también confía que, al menos durante los próximos siglos, no habrá cambios geológicos de consideración.
La empresa espera comenzar los trabajos de construcción en 2014 para almacenar en 2020 unos 12 000 toneladas de uranio utilizado por las centrales finlandesas por ese entonces. Por ahora, y desde 1994 las pastilla de uranio utilizadas en la centrales reposan temporalmente en las piscinas de las cuatro centrales actualmente activas. En la actualidad se construye Olkiluoto3 (OL3) y en el ministerio de economía permanecen solicitudes para otras tres centrales.
Por otra parte, la Agencia de Seguridad Nuclear Finlandesa, STUK, ha detenido los trabajos de construcción de OL3, por problemas se seguridad en el entramando de tuberías de deberían unir la turbina con el reactor.
Este nuevo contratiempo puede, incluso, retrasar aun más el comienzo de las actividades de OL3, que debería haber comenzado sus actividades durante el verano del presente año. Los problemas de la empresa constructora, la estatal gala Areva y STUK han sido numerosos. Por ahora se espera que la central entre en funcionamiento en el verano de 2012, es decir, lleva un retraso de tres año. El costo inicial de 3 000 millones de euros, se ha disparado a 5 200 millones de euros.
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