El presidente de E.ON España defiende un modelo que combine la energía nuclear con las renovables

Energía renovable, nuclear y una mayor eficiencia son las claves hacia un cambio en el modelo energético, necesario por la insostenibilidad del patrón actual. "Necesitamos dirigirnos hacia un modelo energético que combine la sostenibilidad, la competitividad y la seguridad de suministro"; ha dicho Miguel Antoñanzas, presidente de E.ON España. Lo ha hecho al comienzo de la lección inaugural de los cursos de verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander.

"Tardaremos muchos años en cambiar el modelo vigente, pero esto no debe convertirse en una excusa para no empezar a actuar hoy", ha añadido Antoñanzas, que ha defendido un modelo que combine energía renovable, nuclear y la proveniente de combustibles fósiles.

Pese al aumento de las centrales de energías renovables -"en 2008, en Europa, el 43% de la nueva capacidad puesta en funcionamiento ya fue de origen renovable"-, el incremento de la demanda hace que haya que buscar otras soluciones. El presidente de E.ON ha abogado por construir centrales de carbón y gas mucho más eficientes y desarrollar tecnologías para capturar el CO2.

El ministro de Educación, Ángel Gabilondo, ha calificado sus palabras de "mesuradas, realistas, constructivas e innovadoras".

Antoñanzas ha hablado de las posibilidades de las eólicas off-shore (en el mar) y, sobre todo, de la necesidad de hacer una gestión más eficiente de la demanda, a través de contadores que informen al usuario qué está consumiendo y cómo para que pueda tomar medidas para reducir su consumo.

En el modelo energético del futuro jugará un papel importante el coche eléctrico, y al mismo se ha referido Antoñanzas en el paraninfo de La Magdalena, donde se celebran los cursos. "El transporte es responsable de más del 40% del consumo de energía y de más del 25% de las emisiones de dióxido de carbono", ha recordado. Con el vehículo eléctrico se abre la posibilidad de evitar o minimizar el consumo de "petróleo durante el día siguiente en los actuales medios de transporte".

En la inauguración de los cursos, un total de 207 hasta el 12 de septiembre, Gabilondo ha hablado de la UIMP como "una península de la palabra, del pensamiento, de la recreación y de la conversación". El ministro, que ha inaugurado la temporada junto a las autoridades del Gobierno cántabro y los responsables de la Universidad Ménendez Pelayo, ha elogiado el espacio de la UIMP, que este año cumple su 76 aniversario, y ha afirmado que "la situación actual es difícil y requiere reflexión, pensamiento, responsabilidad y compromiso". Por eso, ha instado a los presentes a asumir, en este contexto de crisis global, "el reto de concebir un nuevo modelo social y económico".