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Cárcel por echar de casa a un hijo de 15 años

Un juzgado de lo penal de Málaga condena a nueve meses de prisión a una madre que no dejó entrar al menor en el domicilio familiar por "problemático"

El Juzgado de lo Penal número 10 de Málaga ha condenado a nueve meses de prisión a una madre por un delito de abandono temporal de un menor. La mujer en una ocasión echó de casa a su hijo de 15 años y en otra no le dejó entrar en el domicilio para darle un escarmiento. Dice que es un chico "problemático".

La sentencia declara probado que el pasado 18 de mayo la mujer abandonó a su hijo en la calle, "no permitiéndole entrar en el domicilio" en el que viven en la localidad malagueña de Alhaurín de la Torre. El menor tuvo que ser recogido por unos vecinos. La resolución, contra la que cabe recurso ante la Audiencia Provincial, indica que esta situación "es frecuente", al constar que el día 11 del mismo mes "también fue echado de casa para darle un escarmiento.

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La mujer, según la sentencia, dice que el menor "se iba días y noches enteras de la vivienda sin dar explicaciones". El hijo replica que se marchaba "ante la situación insostenible en la que vivía", aunque admite su "conducta rebelde" y las "constantes discusiones" con su madre.

La juez entiende que ha habido "una actuación negligente por parte de la progenitora". "Aunque el menor se encuentre en plena adolescencia, con la dificultad que ello puede conllevar para la acusada, ello no es óbice para que pretenda echarlo de la casa dejándolo a la intemperie en la calle una noche", señala la magistrada, quien apunta que esta conducta conlleva "un riesgo para el menor".

La Fiscalía de Málaga solicitó 18 meses de prisión y la retirada de la patria potestad por cuatro años, aunque la juzgadora no estima adecuada esta medida al considerar que los hechos se produjeron de forma "puntual para dar un escarmiento" y que sacar al menor de su entorno familiar "sería más perjudicial". El joven aseguró que estaba "bien atendido en sus necesidades esenciales" y que no quería salir del entorno familiar, y la magistrada señala que la actitud de la madre fue "en todo momento de preocupación hacia su hijo".

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