El juez autoriza a una madre menor a que done parte de su hígado para salvar a su bebé
Rocío, de 17 años, podrá ayudar así a su hija Noara, de seis meses, que sufre una dolencia congénita
"Ahora si no llega un hígado recurrirán a mí", ha declarado esta mañana a las puertas del hospital Reina Sofía de Córdoba, Rocío, de 17 años, madre de una niña (Noara, de 6 meses) que padece una dolencia hepática mortal. Rocío había pedido permiso a un juzgado de Sevilla para poder donar parte de su hígado (derecho reservado a los mayores de edad). "Hoy los análisis han salido un poquito mejor", ha comentado la madre, quien ha llevado en tren a la niña, acompañada de sus abuelos, a una nueva revisión desde la localidad sevillana de Camas al hospital cordobés, centro andaluz de referencia para trasplantes.
Se abren ahora dos vías para el futuro inmediato de Noara. Dado que su estado ha mejorado levemente (el nivel de bilirrubina no es "alarmante", según ha informado su madre), los médicos han fijado para el 26 de noviembre la próxima cita para una revisión, es decir, dentro de más de un mes.
Si en ese lapso de tiempo los médicos consiguen un hígado de donante muerto, entoces procederán a la intervención para el trasplante. Si, no obstante, el estado del bebé empeorara bruscamente, recurrirán a parte del hígado de Rocío.
"Doy las gracias a la jueza, al fiscal y a los médicos, porque han hecho posible que se abra esta vía", ha declarado Rocío. Los médicos han convocado una rueda de prensa este mediodía para ofrecer más detalles del caso.
Requisitos para donar
La petición al juez de este permiso provino de Esperanza, la madre de Rocío. En el auto, la juez recuerda que la ley de octubre de 1979 sobre trasplante de órganos, en su artículo cuarto, fija la mayoría de edad como requisito para convertirse en donante. Pero la magistrado María Núñez Bolaños compara las circunstancias de este caso en el "supuesto análogo de esterilización" de un menor y remite a la jurisprudencia del Constitucional para razonar su resolución y permitir a Rocío convertirse en donante, aun siendo menor.
El doctor Rafael Matesanz, director de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), ha considerado hoy "lógica y de esperar" la decisión judicial. No obstante, recuerda que aún la madre debe demostrar su compatibilidad con la niña, informa Europa Press.
El doctor Matesanz ha asegurado que la decisión del juzgado sevillano ha sido "perfectamente lógica" y goza "del máximo respeto por su parte", ya que se trata de un caso en el que la madre-donante ha tomado una determinación "voluntaria y meditada" sobre su salud y la de su hija, que sufre atresia de vías biliares, un defecto en el desarrollo de las vías por donde se expulsa las bilis del hígado, que podría acabar con su vida.
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