La UE pide ir "más allá" del Plan de Acción aprobado en la Cumbre de la Tierra

Los líderes del mundo, reunidos en la clausurada Cumbre de la ONU en Johannesburgo, han aprobado hoy el Plan de Acción para combatir la pobreza y frenar el deterioro del medio ambiente, uno de los dos documentos políticos que han emanado de la reunión. El documento ha sido calificado de insuficiente por la Unión Europea que ha pedido a los países participantes "ir más allá" de lo que exige el texto.

En este sentido el ministro danés de Asuntos Exteriores, Carsten Staur, cuyo país ocupa la Presidencia comunitaria, ha pedido a los participantes que se unan a la coalición de países comprometidos a alcanzar el 15 % en la utilización de energías renovables.

En el Plan de Acción la comunidad internacional se compromete a reducir a la mitad de aquí al 2015 el número de seres humanos sin acceso al agua potable y prevé igualmente un "aumento sustancial" del uso de energías renovables, sin precisar porcentajes ni fechas, en contra de lo que deseaba la UE.

El borrador, preparado por el Gobierno de Suráfrica en su papel de anfitrión de la Cumbre contiene 69 puntos. Además, por la tarde se aprobó la Declaración de Johannesburgo sobre Desarrollo Sostenible, un conjunto de buenas intenciones de tres páginas que alerta sobre el abismo creciente que separa a ricos y pobres y amenaza la prosperidad global, al mismo tiempo que señala la necesidad de una democracia global e instituciones multilaterales.

El Plan de Acción quedó totalmente cerrado sólo esta madrugada, después de que se modificara un párrafo que fue criticado por perjudicar los derechos de la mujer. En el apartado que instaba a "aumentar el acceso a los servicios de salud", a la frase "en conformidad de las leyes nacionales y los valores culturales y religioso del país", que levantaba ampollas entre las feministas, se añadió: "y conforme a todos los derechos humanos y libertades básicas".

"No ha sido un fracaso"

El secretario general de la ONU, Kofi Annan, ha reconocido que la Cumbre de Johanesburgo no ha producido todo lo que se esperaba, pero ha insistido en que "no ha sido ningún fracaso". "Hay que tener cuidado para no esperar milagros de Cumbres como ésta", ha dicho en rueda de prensa.

En el último tramo de la ronda de ponencias, en la sesión matutina, destacó el muy esperado discurso del jefe de la delegación estadounidense, el secretario de Estado Colin Powell, que fue interrumpido por abucheos y protestas. Centenares de los presentes corearon lemas como "Bush, "¡qué vergüenza!", pese a las amonestaciones de la presidenta de la sesión, la ministra sudafricana de Exteriores, Nkosazana Dlamini-Zuma.

Las protestas volvieron a estallar en las galerías, e incluso se extendieron a algunas de las delegaciones oficiales, cuando Powell afirmó que Estados Unidos intenta, mediante el desarrollo de nuevas tecnologías, reducir las emisiones de los gases que producen el "efecto invernadero". Muchos de los presentes expresaron su indignación ante esta afirmación, puesto que Estados Unidos se ha negado a ratificar el Protocolo de Kioto para restringir las emisiones de dichos gases.