El arte de hacer dinero con la provocación

Es el artista vivo más cotizado del mundo, un provocador que entiende las reglas del juego: convertir los deseos en necesidades, transformar los iconos del pop en piezas de museo y añadir marketing a la pintura y la escultura. De esta forma, Jeff Koons (York, Pensilvania, 1955) ha conseguido estar en todas partes, desde las portadas de los discos de Lady Gaga (Artpop, 2013) hasta las etiquetas de las cremas de Kiehl’s, pasando por las colecciones de millonarios como Steve Wynn, el magnate de los casinos de Las Vegas que en mayo pagó 21 millones de euros en una subasta de Sotheby’s por su American Hero, Popeye (2009).

Koons, exmarido de Cicciolina, sabe cómo llamar la atención. A su monumental Puppy de Bilbao le va a nacer un hermanito en el Rockefeller Center de Nueva York, Split-Rocker; un muñeco hecho también de flores y con cara de dibujo animado que será el reclamo de Jeff Koons: una retrospectiva, la muestra que del 27 de junio al 19 de octubre albergará el museo Whitney. Scott Rothkopf, licenciado por Harvard y antiguo editor de la revista Artforum, es el comisario de esta muestra, que después viajará al Pompidou de París y en 2015 llegará al Guggenheim de Bilbao. Según nos explica en una entrevista, Koons es una fuerza omnipresente en el mundo actual: «Allá donde uno mire, siempre encuentra su influencia».

¿Por qué Jeff Koons es el artista vivo más cotizado?

No soy un experto en el mercado, pero creo que los coleccionistas valoran la forma en que atrapa la esencia de la época; captura la emoción y los descontentos de nuestro tiempo.

Él entiende bien la relación entre arte, marketing y negocios, ¿a qué se debe que lo ataquen por hacerlo?

Muchos críticos dudan si es crítico o cómplice de las estructuras de poder político y económico. Para algunos, esta postura resulta problemática; pero para mí es, sin duda, parte de lo que hace su trabajo tan interesante y convincente.

¿Podría explicarnos cuáles son para usted las obras más importantes de Jeff Koons: una retrospectiva?

En la exposición hay muchísimas piezas asombrosas e icónicas. Me encanta la porcelana Michael Jackson and Bubbles, porque en ella Koons plasma la complicada naturaleza de la superestrella del pop.

¿Qué destacaría del artista?

Ha roto más barreras que ninguna otra persona de su generación. Su influencia es total, desde su aproximación a la fabricación técnica y a la cultura pop hasta su asimilación de las fuerzas culturales y sociales.

One Ball Total Equilibrium Tank (Spalding Dr. J 241 Series, 1985).

Cortesía de Whitney Museum NY