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Sydney Sweeney y su vestido lencero en la alfombra roja: corsé a lo Madonna y encaje victoriano

La actriz, vestida de McQueen, presenta en el BFI Festival de Cine de Londres su nuevo proyecto, ‘Christy’, un drama en el que encarna a la boxeadora Christy Martin

Sydney Sweeney

“A los tres años ya montaba obras de teatro para mis abuelos en su casa. Siempre me gustó jugar, actuar, dejar volar mi imaginación. Y cuando me di cuenta de que eso era un trabajo real fue todo lo que deseé hacer”, contaba Sydney Sweeney (Spokane, Washington, 28 años) en una entrevista publicada en 2023 en S Moda. Entonces había despuntado ya por sus interpretaciones en e El cuento de la criada, The White Lotus y Euphoria, la serie que la lanzó a la fama, y se había embarcado en un proyecto más independiente y político, Reality, una película de la directora Tina Sutter en el que interpretaba a una analista de inteligencia acusada de filtrar información secreta sobre las presidenciales de 2016 ganadas por Donald Trump. La crítica elogió ese papel dramático y ahora, tras un verano de polémicas —en el que se ha revelado que está registrada como votante del Partido Republicano y ha protagonizado una viral campaña publicitaria de vaqueros criticada por “racista” al hablar de genes y jeans— la intérprete vuelve con un drama, Christy, película en la que encarna a la boxeadora profesional estadounidense Christy Martin y que este viernes presentó en el BFI Festival de Cine de Londres.

Para encarnar a la deportista, Sweeney atravesó una transformación física: tuvo que ganar musculatura y peso, se despidió de su característica melena rubia y aprendió a defenderse en el ring. “Me encanta transformarme para hacer personajes”, explicó durante una entrevista del equipo del filme con Los Angeles Times, “entrené durante dos meses, me hice un gimnasio en casa, tuve un entrenador de boxeo y otro de fuerza, un nutricionista... Hacía ejercicio cada día”. El biopic —que se estrenará en noviembre y en el que Sweeney figura en el listado de productores— relata el ascenso de Martin en los noventa, cuando se convirtió en una boxeadora estrella, y explora la relación de la deportista con su marido, mánager y entrenador, Jim Martin, una figura dominante que dirigió su carrera y trató de asesinarla en 2010. Siete años más tarde, Christy, que ha asesorado a Sweeney durante el rodaje de la película, se casó con la también boxeadora Lisa Holewyne. El filme fue estrenado en septiembre en el Festival de Toronto y ahora ha llegado al Festival de Cine de Londres, sobre cuya alfombra roja Sweeney posó con un modelo lencero, muy lejos del method dressing que muchos intérpretes practican últimamente en las presentaciones de sus proyectos, de Zendaya con Dune y Thimothée Chalamet con Un completo desconocido a los protagonistas de Wicked durante su promoción.

El vestido rosa pálido de corsé satinado con ballenas marcando su silueta y encaje que llevó Sweeney durante la presentación en Londres de su nuevo proyecto llevó a la alfombra roja una de las tendencias de las últimas semanas de la moda, la de las prendas lenceras que salen del boudoir para tomar las calles. No se trata de algo nuevo: en los noventa, corsés, sujetadores, fajas, ligueros y camisones se popularizaron gracias a figuras como Madonna o Courtney Love. Esta última elevó el camisón y las enaguas a la categoría vestidos de noche grunges y Madonna, en su gira Blond Ambition Tour, colaboró con Jean Paul Gaultier para crear un vestuario llevado a la categoría de icono en el que los bodys-faja satinados se superponían a otras prendas y esculpían la figura de la cantante en escena. El modelo que ha llevado Sweeney en Londres toma la paleta de esos bodies, pero sin sus emblemáticos pechos-cono, que en el vestido creado para ella por la firma británica McQueen se transforman en un escote palabra de honor de satén superpuesto sobre encaje de inspiración victoriana, uno de los emblemas de la casa fundada por el desaparecido Alexander McQueen.

Seán McGirr, director creativo de McQueen desde 2023, es el responsable de este modelo, que se aleja de los estilismos habituales de Sweeney en sus apariciones públicas. Como su estilista, Molly Dickson, ha explicado en la edición estadounidense de Vogue, la idea era ofrecer una imagen diferente a la habitual: “Queríamos llevar a Sydney en una nueva dirección, algo diferente a las siluetas más románticas y de princesa que ha tendido a lucir en el pasado. Lo que más me gusta de ella es que siempre está abierta a experimentar y evolucionar. Este look buscaba sacarla un poco de su zona de confort”. Aún queda promoción para explorar otros registros estilísticos y, además, la actriz tiene una larga lista de proyectos en el horizonte: desde el esperadísimo estreno de la tercera temporada de Euphoria (con Rosalía en el reparto) hasta otros cinco títulos, entre ellos Scandalous! (película dirigida por Colman Domingo en la que interpretará a Kim Novak) o La asistenta, junto a Amanda Seyfried.

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