Por qué comprar una buena crema de noche es la mejor inversión cosmética del otoño
Y no, no es una moda ni un reclamo para vender más cosméticos. Es ciencia.
El mejor cosmético de acción nocturna es gratis: dormir mucho y a pierna suelta. El segundo ya implica algo de inversión y se trata de una buena crema de noche. Así que al ‘no te meterás en la cama sin haberte limpiado bien el rostro’, añade ‘dormirás lo suficiente y elegirás bien tu crema de noche’. Y no, no es una moda ni un reclamo para vender más cremas. Es ciencia. Recientes estudios publicados en Nature Cell Biology confirman que hay una relación directa entre el ritmo circadiano y la capacidad de nuestra piel para sintetizar colágeno nuevo y eliminar las fibras de colágeno más antiguas.
Imagina la piel como un taller de reparaciones de todas las agresiones que se producen durante el día. Es eficiente, pero necesita su tiempo y le cunde más en horario nocturno. Por si fuera poco, según vamos cumpliendo años, esa capacidad va decayendo. Y ahí entran las cremas de noche, echando una mano para que el mecanismo no decaiga. Por eso es tan importante elegir bien una crema de noche adecuada a las necesidades de tu piel en cada momento. ¿Quieres suavizar arrugas? ¿Mejorar la textura de la piel? ¿Quitarte manchas? ¿O, simplemente, quieres levantarte con la cara descansada, hidratada y con la barrera cutánea a tope?
Suena el despertador y tienes la piel seca
Seguro que en más de una ocasión te has planteado por qué, si te embadurnas en crema antes de acostarte, te levantas con la cara tirante. O por qué la notas más luminosa o más elástica. La respuesta está en qué le sucede a tu rostro mientras duermes y por qué importa tanto el tipo de cosmético que apliques antes de irte a la cama. “Por la noche baja nuestra frecuencia cardíaca. Esto hace que descienda la temperatura corporal. Paralelamente entran en funcionamiento las hormonas de crecimiento que activan la reparación del daño celular de la piel. El ratio de división celular aumenta y se forman nuevas fibras de tejido conectivo. Además, se degradan los radicales libres, resultado de la contaminación ambiental y del propio metabolismo diario”, explica la doctora Christine Schrammek-Drusio, dermatóloga, directora ejecutiva y jefa de desarrollo de productos de Schrammek.
Mientras estás en brazos de Morfeo no hay sol, ni contaminación, ni situaciones estresantes. La piel lo sabe y aprovecha para ponerse a reparar. También relaja la función barrera produciendo menos grasa. Por eso es normal levantarte con la piel algo reseca. “Tendrás que hidratarla bien antes de ir a dormir. Y ayudar en la tarea de regeneración con retinoides o hidroxiácidos”, apunta la dermatóloga Ana Molina (@dr.anamolina), del Hospital Fundación Jiménez Díaz.
Los dermatólogos se refieren al retinol como el ‘gold standard’ de las cremas de noche. Las cremas con retinoides mejoran la hidratación cutánea, estimulan la producción de colágeno y promueven cierta renovación celular. La dermatóloga Paloma Cornejo no solo lo recomienda. También lo incluye a diario en su rutina nocturna, tal como compartía recientemente en Instagram. Si ve la piel algo irritada, cambia los retinoides por una combinación de ácidos. Sus favoritos: glicólico, salicílico, mandélico y azelaico. “Van muy bien para pieles con un poco de acné. También ayudan a mejorar el aspecto de un poro feo, para que la piel se vea más satinada. Y funcionan bien en pieles con algo de rosácea”. En caso de notar tu piel reactiva o algo alterada (algo habitual en tiempos de mascarilla), Cornejo sugiere “apostar por una hidratante con algo más de cuerpo que la de la mañana. Si no tienes otra, usa la misma de la mañana”.
Mejor cuanto menos estrés
Todo este arsenal de activos es innecesario en las primeras décadas de nuestra vida. De niños, la reparación celular por la noche trabaja con la precisión de un reloj suizo. Te haces un raspón en el parque por la tarde y a la mañana siguiente está casi curado. A medida que cumples años, las heridas tardan más en cicatrizar o lo hacen peor. Por eso los laboratorios no paran de desarrollar nuevas moléculas o fórmulas cosméticas que aseguren esa renovación nocturna.
A principios de la década de los 2000, los laboratorios Estée Lauder descubrieron que nuestro cuerpo cuenta con unas moléculas de micro señalización en las células de la piel que les indican cómo acometer esas tareas de renovación. También cuándo hay que producir más colágeno, la proteína más abundante en la piel y responsable de su turgencia. Con el paso del tiempo, esa molécula ‘guía’ empieza a escasear. Para reemplazarla sus investigadores desarrollaron la tecnología Chronolux Power Signal, un complejo de levaduras, péptidos e ingredientes botánicos que activa una nueva micro molécula de señalización. Es el gran hallazgo de la nueva fórmula de su mítico Advanced Night Repair.
En los laboratorios Sesderma la última propuesta es asegurar a la piel un estado de calma que facilite sus tareas de renovación. Es la clave de la línea Serenity, formulada con melatonina y un complejo relajante. La melatonina actúa sobre los queratinocitos y los fibroblastos, protegiéndolos del daño de la radiación ultravioleta y el estrés oxidativo. El complejo relajante incluye magnesio y flor de loto azul y blanca. Su función es la de aportar energía a nivel metabólico, potenciar la síntesis de colágeno y aumentar las reservas de antioxidantes. La fórmula se completa con otros activos antiedad, hidratantes y regenerantes como la adenosina, el ácido hialurónico, la centella asiática o la cúrcuma. La ausencia de luz de la noche también es el momento ideal para combatir las manchas.
La cosmética se pone de tu parte para que cada mañana te veas con mejor cara que cuando te acostaste. Tú solo tienes que hacer el esfuerzo por acostarte siempre a la misma hora, para no alterar los ritmos circadianos, y dejar que otros se encarguen del trabajo.
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