“Vamos hacia una concepción de los edificios como sistemas sensibles”

Un futuro de edificios hiperconectados y adaptativos que solo llegará pronto si la regulación marca el ritmo, esta es la predicción de Ming Hu, profesora de Arquitectura de la Universidad de Maryland. La experta investiga el cruce entre tecnología, edificación y sostenibilidad.

P. ¿Cómo está influyendo la tecnología en la construcción residencial, y cómo podría seguir haciéndolo en el futuro?

R. Creo que las próximas dos décadas podrían ser la era de los edificios saludables e inteligentes. Porque utilizamos tecnologías inteligentes en nuestra vida diaria —como los teléfonos, los sensores y los sistemas activados por voz—, pero no tenemos una imagen clara de qué es un entorno construido inteligentemente, capaz de adaptarse a las necesidades de los ocupantes y a cambios de temperatura. Vamos hacia una concepción de los edificios como sistemas sensibles, centrados en el usuario, conscientes de la salud e interconectados. Estos sistemas proporcionarán mejores entornos de vida y de trabajo. Un edificio saludable también puede satisfacer la salud mental y aumentar la productividad.

P. ¿Y qué tecnologías están impactando más en esa evolución?

R. En los edificios inteligentes, la computación ubicua y el Internet de las cosas. Cada vez más edificios tienen sensores inteligentes y sistemas nanointegrados que recolectan y analizan los datos de los ocupantes para realizar ajustes de forma automática. Y si hablamos de rehabilitación de edificios para hacerlos más sostenibles, los escáneres 3D permiten solventar el problema de la ausencia de los planos en los inmuebles más antiguos, acortando los plazos y provocando menos molestias a los ocupantes.

P. Se investiga mucho sobre los materiales, y hay todo tipo de soluciones. ¿Qué pueden aportar a la eficiencia energética de los edificios?

R. Cuando estudias el ciclo de vida de un edificio [que incluye el reciclaje y reutilización de sus materiales] te das cuenta de que muchos de los nuevos materiales tienen un enorme impacto ambiental, especialmente los materiales sintéticos que se están utilizando como aislantes. Son muy eficaces respecto al consumo de energía, pero no son nada amables con el medio ambiente. A veces, con mejoras tecnológicas sencillas y con métodos de construcción eficientes puedes lograr grandes avances sin necesidad de utilizar nuevos materiales.

P. ¿Qué países marcan el camino hacia los edificios sostenibles? ¿Qué importancia tienen en ese proceso políticos y reguladores?

R. En general, los países europeos están más avanzados que Estados Unidos en este terreno, pero es difícil decir qué países avanzan más rápido hacia la construcción sostenible. Lo importante es que todos avancen, y de forma rápida. La labor de los gobiernos y los legisladores es fundamental; necesitamos políticas ambiciosas. Las regulaciones estrictas son absolutamente imprescindibles para acelerar la transición a los edificios de consumo nulo.

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