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Emprendedores

Siete empresas con propósito que favorecen el desarrollo sostenible

La reforestación, la lucha contra la despoblación, la energía renovable y el acceso al agua en todo el mundo son algunas de los retos de estas empresas

Getty Images

Transformar Nuestro Mundo es el lema de la Agenda 2030. Este documento internacional, firmado por 193 países, España entre ellos, desgrana tres objetivos principales para la próxima década. Erradicar la pobreza, universalizar la aplicación de los Derechos Humanos y lograr un desarrollo económico global sostenible y respetuoso con el planeta. Pero no solo afecta a los estados, también a los individuos y a las empresas, que cada vez con más frecuencia tienen estos objetivos ya no como detalle accesorio que viste bien, sino como objeto principal de su labor. Estos son algunos de casos destacados.

Moda y reforestación

One Oak es una empresa de moda comprometida con el medio ambiente. Venden relojes, mochilas, bolsos y gorras desde 2016 y todos sus productos están fabricados con materiales reciclados. “Madera de origen certificado; plástico reciclado de botellas y bolsos; corcho natural y cartón reciclado para embalajes son los que más empleamos”, asegura Guillermo Íñiguez, cofundador de OAK. Además, por cada producto que venden se comprometen a plantar un árbol. “La gente elige la localización de su árbol y le pone nombre”, añade Íñiguez. Una vez hecho, la empresa manda un email con una foto a cada comprador. Su objetivo es compensar el impacto ambiental que ellos mismos generan en el proceso de fabricación y transporte. Comenzaron reforestando Galicia tras los incendios de 2017 y continuaron plantando árboles en Doñana, en la Comunidad Valenciana, en Calafell (Barcelona) y en frente de la T4 del aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid. “En la última campaña de reforestación han participado más de 500 voluntarios”, subraya Íñiguez.

El karma aplicado al consumo

“Antes de montar la empresa pensaba en que compramos muchas cosas que no necesitamos, las almacenamos y las olvidamos”, afirma José María García, fundador de Gratix. La compañía lanzó una aplicación móvil en 2017 para regalar lo que el usuario no usa y pedir lo que necesita. A través de un sistema de puntos los consumidores pueden pedir ciertos productos y donar otros. “Es un poco como el concepto del karma. Generas ayuda y recibes ayuda”, señala García.

El intercambio se produce generalmente en persona pero otras veces se ocupa del transporte Koiki, una empresa comprometida con el medio ambiente que se encarga de repartir los pedidos andando, en bicicleta o en coche eléctrico y emplean a personas de colectivos vulnerables. “Lo más extraño que he visto regalar es una cabina de rayos uva. Pero los utensilios más habituales son aquellos que tienen que ver con las familias. Los hijos se hacen mayores, dejan de necesitar, libros, ropa, artículos deportivos y los sube a la aplicación”, afirma García.

Holaluz y la energía verde

Holaluz produce energía 100% verde, es decir, de origen renovable. La empresa produce energía de fuentes eólicas, hidráulicas, solares, biogás y biomasa. El proyecto de Holaluz es sostenible y ambicioso: “queremos crear y vivir en un mundo 100% renovable para todo el mundo, además hoy en día, la energía verde es la única solución para salvaguardar el planeta”, afirma la compañía.

La lucha contra la despoblación

En 1997 un grupo de jóvenes comenzó a generar la idea de lo que hoy es Alma Natura. Los chavales de Arroyomolinos de León (Huelva) no querían marcharse a trabajar a las ciudades y necesitaban alternativas laborales para poder quedarse en las zonas más despobladas. Ahora dan formación presencial y después online con la intención de que los alumnos puedan emprender en sus pueblos. Todos los proyectos educativos pasan por la sensibilización. Alma Natura organiza charlas en institutos para que los jóvenes conozcan las salidas que tienen en zonas rurales. “Hasta 2010, el 95% de nuestros proyectos se financiaban con fondos públicos pero tras la crisis, la mayoría de financiación es privada”, comenta Manzano. “Queremos dar respuesta a la gente joven de cuatro maneras: educación, empleo, salud y tecnología”, señala Juan José Manzano, fundador de Alma Natura.

Además cuentan con proyectos como Rural Tic, en el que la empresa se encarga de ayudar a la gente mayor que vive en pueblos a manejarse con los ordenadores para mejorar su vida diaria. Desde pedir cita en el medico o en la ITV hasta conectar Skype para hablar con sus hijos si viven fuera de España. “Hemos ayudado a más de 8000 mayores de toda España”, afirma Manzano. Con Giramujeres ponen en contacto empresas privadas para que financien pequeños negocios de empresarias. “Se ha microfinanciado desde una tienda de alimentación hasta un hostal rural”, añade.

La venta de productos ecológicos

Los hermanos Palacios cerraron su empresa de marketing digital y decidieron cambiar el mundo de la publicidad por Farmidable, un negocio que generase un impacto positivo al medio ambiente. “Tuve contacto con una granja biodinámica en Inglaterra que hacia productos lácteos y frutas y los vendía en Londres”, cuenta Alberto Palacios.

La empresa pone en contacto el producto local con el consumidor. Los productos se piden por internet y se venden en empresas, centros educativos o coworkings. “De esta manera se desarrolla la economía local y se reduce el CO2 al no tener que desplazarse lejos a comprar los productos.”, afirma Palacios. También se pueden pedir por internet y llegan a casa con transporte sostenible. Dentro de la M-30 se transportan en bici y fuera con un vehículo eléctrico. De momento Farmidable solo vende productos en Madrid pero planean dar el salto pronto a Barcelona, Valencia y Sevilla.

Talleres de cocina sana y reciclaje de ropa

Veritas además de vender productos ecológicos en Cataluña, Baleares, País Vasco, Navarra en tiendas físicas y también de manera online, ofrece recetas y talleres para preparar platos sanos y veganos. Además de la labor nutricional, la compañía está comprometida con el consumo consciente y responsable. Si el cliente lo desea, recogen gratis ropa, calzado y complementos y los llevan a la fundación humana para que los reciclen y puedan tener una segunda vida. 

Accesibilidad al agua en todo el planeta

La primera botella de agua de Auara se lanzó en septiembre 2016. Gracias a estas ventas, la empresa financia proyectos con el agua para el consumo humano como protagonista. “Hacemos pozos, de bomba manual o eléctrica, recogida de agua de lluvia y canalizaciones principalmente. Las infraestructuras son sencillas técnicamente pero acordes a la realidad de cada lugar ya que la mayoría de proyectos se desarrollan en África, Camboya e India”, señala Antonio Espinosa de los Monteros, cofundador de Auara.

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