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Firma invitada

Del ‘big data’ al ‘smart data’: encontrar la mina de oro en la montaña de datos

La información es importante, sí, pero demasiada puede llegar a ser confusa y hasta contraproducente, explica el cofundador de Ofertia

La llegada de los smartphones y la conexión constante a Internet han revolucionado el día a día de todos. Ver vídeos y escuchar música en streaming, visitar tus web preferidas, escribir mensajes, o usar GPS son hoy cosas habituales que uno puede hacer en cualquier momento y lugar.

Esto conlleva que en poco tiempo el volumen de datos, tanto consumidos como generados por los usuarios, haya crecido de manera exponencial, y semejante cantidad de información introduce la necesidad de un cambio de paradigma poco conocido hasta el momento, uno enfocado al big data.

El término big data, que hoy abre la cabecera de tantas noticias,hace referencia a conjuntos de datos que, debido a su gran volumen, necesitan sistemas especializados de almacenado y procesado para poder trabajar con ellos de manera eficiente.

El big data se desarrolla a través de cuatro v: volumen de datos, velocidad en la que se obtienen y transfieren los datos, veracidad de las fuentes, y variedad de las fuentes

Pero en medio del mar de datos que se acaban generando, al final del día resultara muy fácil perder la perspectiva. La información es importante, sí, pero demasiada puede llegar a ser confusa y hasta contraproducente.

Aquí es donde el big data da un paso hacia adelante, el smart data, que se encarga de detectar señales y patrones relevantes a través de algoritmos inteligentes, que frecen un gran abanico de posibilidades y enfoques para su estudio, uso y toma de decisiones.

Si bien es cierto, las organizaciones empresariales para entrar en el mundo del big data deben acometer cambios estructurales e inversiones en software y algunas veces hardware, esto solamente les permite recoger datos, para su análisis, interpretación y uso, será capital desarrollar equipos e incorporar perfiles especializados ya que los datos en bruto no tienen ningún valor.

El big data se desarrolla a través de cuatro v: volumen de datos, velocidad en la que se obtienen y transfieren los datos, veracidad de las fuentes, y variedad de las fuentes.

A esto el smart data, aporta una V más: “el Valor de los datos”.

El smart data se encarga de transformar el big data en información disponible y accionable en tiempo real con finalidad de negocio. Descubrir si una nueva función de una app está cambiando el comportamiento de los usuarios, ser capaces de detectar o predecir picos de visitas o determinar los intereses de la gente que navega por una web.

En las plataformas en las que cientos de usuarios pueden estar interaccionando por segundo, cada uno con sus preferencias y peticiones individuales, es vital poder responder a las necesidades de todos ellos en tiempo real. Todo tiene que estar ajustado para dar el mejor servicio, y como uno puede imaginar, coordinar esto no es tarea fácil. La implementación de distintas tecnologías de smart data ha sido clave para democratizar los datos y hacerlos habilitarlos a todos los departamentos de la compañía, y también para entender mejor a nuestros usuarios, y mejorar la calidad de nuestro producto y servicio.

Desde la automatización de procesos manuales para hacer nuestra plataforma más atractiva, hasta el diseño de sistemas de predicción para anticiparnos a lo que esté por venir, el Smart Data nos ha ayudado a hacer la información más comprensible, y nos proporciona una manera de encontrar la mina de oro en la montaña de datos.

Jaume Betrian es cofundador y director ejecutivo de Ofertia 

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