PNV y EH Bildu defienden el derecho a decidir pero discrepan sobre la vía para alcanzarlo
Las dos formaciones nacionalistas hablan de un derecho irrenunciable pero el PNV insiste en que no puede ser "unilateral"
El llamado derecho a decidir ha vuelto al primer plano en el Parlamento vasco. El PNV y EH Bildu han aprobado en la Cámara de Vitoria una proposición no de ley sobre la reforma del Estatuto de Gernika en la que plantean “dar cauce” a la posibilidad de modificar el encaje del País Vasco en España, algo que consideran irrenunciable. En un debate que se repite de forma periódica, el PNV y EH Bildu han defendido que los ciudadanos vascos tienen derecho a pronunciarse sobre su futuro, aunque también han puesto de manifiesto sus diferencias a la hora de aplicarlo. La portavoz de EH Bildu, Maddalen Irirarte, ha espetado al PNV que, frente a sus dudas, ellos van a seguir “trabajando” para que Euskal Herria sea “una república independiente”. El portavoz del PNV, Joseba Egibar le ha respondido que “el derecho a decidir, aunque sea un derecho de los pueblos, no podrá hacerse de manera unilateral”.
Estas diferencias también están aflorando en la Ponencia de Autogobierno donde ambas formaciones no han sido capaces de fraguar un acuerdo en torno a la reforma del estatuto de Gernika. Aunque la bilateralidad en la relación entre Euskadi y el Gobierno central y derecho a decidir formaban parte de las bases que las dos formaciones nacionalistas pactaron con el objetivo de actualizar el texto de Gernika, el cisma entre ambas es, de momento, insalvable.
Los dos partidos nacionalistas han sacado adelante la propuesta por 47 votos a favor del PNV y de EH Bildu, además del voto de la diputada de Elkarrekin Podemos, Pilar Zabala, de los 75 escaños totales. El portavoz de Elkarrekin Podemos, Lander Martínez, ha justificado la abstención mayoritaria de su grupo porque se trata de “un debate estéril” cuando lo que hay que hacer es “empezar a trabajar por crear puentes”. Socialistas y populares, que han votado en contra, han interpelado al PNV con cuál de las dos almas del partido nacionalista hay que quedarse, si con la del lehendakari, Íñigo Urkullu, o con la del portavoz, Joseba Egibar. “Me gustaría que pensaran si esto que plantean es más fácil que una reforma de la Constitución en clave federal que defendemos los socialistas ante la oportunidad que plantea la conformación de un nuevo Gobierno en Madrid”, les ha dicho el portavoz del PSE, José Antonio Pastor.
No es la primera vez que ambas formaciones se unen para sacar un texto similar. El 11 de abril, en vísperas de las elecciones generales, las dos formaciones sumaron sus votos en torno a un texto casi calcado en el que reclamaron el reconocimiento del derecho a decidir y una nueva relación con el Estado basada en la bilateralidad. El PNV dio luz verde a ese acuerdo justo al día siguiente de hacer público su programa electoral. El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, dijo entonces que iban a pelear por el autogobierno la próxima legislatura, “conscientes de que plantear la autodeterminación iba a ser complicado”.
La portavoz de EH Bildu, Maddalen Iriarte, ha acusado a los socialistas de no haber desarrollado el Estatuto pese a haber tenido incluso mayorías absolutas, y de atar al PNV en las instituciones. “La única fórmula que asegura el futuro de España es reconocer que hay nacionalidades que quieren decidir su futuro”, ha dicho. “Este país llamado Euskal Herria es una nación y tiene derecho a decidir su futuro”, ha insistido. “Los derechos del pueblo también están recogidos en el Estatuto”, ha argumentado Egibar, planteando la pregunta de qué prima, si los derechos colectivos contenidos en el texto de Gernika, o el marco legal que impide una ejercitar esos derechos.
La proposición no de ley considera “imprescindible un nuevo modelo de relación con el Estado, basado en la igualdad, la bilateralidad y el pacto” que incorpore un sistema de garantías de cumplimiento. El texto pide que la Cámara ratifique el desarrollo íntegro del Estatuto, reafirmando el espacio de poder no transferido, y exige que el Gobierno central acabe con la política de dispersión de los presos de ETA y excarcele a los enfermos. PNV y EH Bildu rechazan las estrategias de quienes quieren cuestionan el Estado de las Autonomías, —como Vox e incluso Ciudadanos, aunque sin citarlos— pero también de quienes vacían a través de la legislación básica, las competencias exclusivas vascas. En ese contexto plantean la derogación de la ley educativa, la reforma laboral y la denominada ley mordaza.
Pese a la coincidencia en la defensa del derecho a decidir, el coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, ha dejado claro lo que piensa del PNV. En una entrevista radiofónica ha dicho que el PNV “ha endulzado” el derecho a decidir hasta “hacerlo desaparecer” en el nuevo Estatuto para que lo apoye Elkarrekin Podemos. En su opinión el PNV está frustrando la institucionalización de este derecho en la reforma estatutaria y ha animado a sus dirigentes a “saltar la tapia” para lograr la soberanía.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.