El Gobierno se desmarca del viaje de Zapatero a Venezuela

El Gobierno conocía desde hace varios días la intención del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero de viajar a Venezuela. Lo que el Ejecutivo dice desconocer es el motivo de la visita, que comenzó este martes, cuando el exdirigente socialista aterrizó en Caracas en un avión privado, según informó la prensa venezolana. Fuentes oficiales del Ministerio de Exteriores aseguraron que el viaje, del que estaban avisados por motivos de seguridad, tiene carácter privado. Con esa afirmación, el Gobierno deja claro que Zapatero no actúa como emisario de la diplomacia española. Tampoco de la europea, según confirman fuentes comunitarias.

El expresidente desempeñó en el pasado un relevante papel como mediador en el conflicto venezolano. Pero el fracaso, a principios de 2018, de las negociaciones entre el régimen de Nicolás Maduro y la oposición dejaron muy expuesto al expresidente español, al que una parte de las fuerzas opositoras criticó por considerarlo demasiado cercano a las tesis de Maduro. Pese a todo, en aquella ocasión el exmandatario español permaneció en contacto con el servicio diplomático europeo, al que iba informando de sus gestiones.

Ahora nadie parece saber a qué llamada ha acudido Zapatero. La representación en España del presidente interino, Juan Guaidó, se desvincula de su presencia en Caracas, lo que sugiere que Zapatero no tiene pactado un diálogo con ese bloque que permita buscar una solución pacífica a la bicefalia que lastra al país desde finales de enero. Entonces buena parte de la comunidad internacional —incluida España— reconoció a Guaidó como presidente de Venezuela con el encargo de convocar elecciones, pero la situación permanece bloqueada.