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Sánchez: “La próxima Cámara debe parecerse más a la España real, en la que cabemos todos”

El presidente del Gobierno avisa en la última sesión de la legislatura: "Con la ultraderecha no se puede ir ni a la vuelta de la esquina"

El presidente del Gobierno, Pedro Sanchez durante su intervención este miércoles en el Congreso. En vídeo, Pedro Sánchez en el Congreso: "La división nos hace más débiles".Vídeo: JAIME VILLANUEVA (EL PAIS) | EUROPA PRESS
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Ha sido una legislatura llena de “primeras veces”. La primera vez que se llega al Gobierno a través de una moción de censura y con el Congreso presidido por una persona de un partido diferente al del Ejecutivo. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, confía en que tras las elecciones del 28 de abril, el Congreso “se parezca más a la España real: abierta, tolerante, integradora. Una España en la que cabemos todos”. Estas han sido las primeras palabras del último pleno del Congreso de esta legislatura que empezó en 2016. Los líderes del PP y de Ciudadanos, Pablo Casado y Albert Rivera, respectivamente, no han tenido contemplaciones con Sánchez.  No han salvado ni un solo día de los ocho meses de Gobierno de Pedro Sánchez y han mostrado la aspiración de que no vuelva a gobernar porque hasta ahora ha gobernado con "los comunistas y con los que quieren romper España", según expresiones de Casado. Otros argumentos ha utilizado Rivera que, en esta ocasión, ha puesto el énfasis en "el sectarismo" del Gobierno socialista por sus nombramientos y su rechazo a pactar, según su visión.

El jefe del Gobierno, sin embargo, sí se ha referido con cierta extensión al orden del día de este pleno. La preparación de España ante el Brexit en defensa de los intereses de los españoles; la situación en Venezuela y la actuación del Gobierno ante los ministros que han utilizado sociedades instrumentales para cumplir sus obligaciones fiscales han sido los asuntos por los que Pedro Sánchez ha sido llamado por la oposición al Congreso.

No entraba en el guion la declaración política inicial que ha hecho el jefe del Ejecutivo pero ha querido dejar un mensaje preelectoral: “Pese a la desnaturalización de los mecanismos parlamentarios y la obstrucción que se ha producido, quiero poner en valor la función parlamentaria". El nuevo Parlamento que surja del 28-A ofrecerá una imagen más real de la España actual, auguró Sánchez, "una España abierta e integradora donde no hay una única forma de sentirse español. Una España en la que cabemos todos". Ha pedido a los partidos que extraigan las lecciones oportunas "sea cual sea el resultado para que la Cámara se parezca más a la España real". En la concepción de Sánchez " no cabe una sola idea de ser español, sino muchas, ese es el verdadero espíritu de la Constitución, que debería preservarse como primera norma de la Cámara".

Brexit y Venezuela

Como anuncio, el jefe del Gobierno ha señalado que el próximo viernes se aprobará un decreto ley para defender los intereses de los españoles ante una salida "desordenada" del Reino Unido de la UE. Las medidas de ese decreto serán “temporales y unilaterales” a la espera de la reciprocidad británica. Nada nuevo sobre Gibraltar, salvo resaltar que su Gobierno no ha variado “ni plan, ni equipo negociador” respecto a lo que tenía en marcha el Gobierno anterior. No obstante, ha deslizado el reproche de que el Ejecutivo de Mariano Rajoy no tenía nada preparado para defender los intereses de España y los españoles. El plan de contingencia que ha preparado se traducirá en el real decreto que verá la luz el próximo viernes. La salida del Reino Unido de la UE tiene como una de las causas fundamentales el avance en ese país de la ultraderecha "que no necesita estar en el poder para condicionar la agenda política". Sánchez ha resaltado este argumento por las connotaciones implícitas españolas sobre Vox, que puede ser la fuerza determinante de un futuro Gobierno con PP y Ciudadanos.

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No ha querido dejar dudas el presidente del Gobierno sobre su apoyo al presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó y la falta de legitimidad de Nicolás Maduro “porque sus elecciones no fueron libres”. Ahora, se apuesta por unos comicios con garantías como única solución y dejó claro que Maduro "no tiene intención de negociar sino de ganar tiempo para perpetuarse en el poder”.

Más de veinte mil venezolanos han llegado a España en demanda de protección. Muchos están en condiciones de pedir la solicitud de asilo pero para los que reúnen los requisitos se está pensando en un “estatuto migratorio” especial, según ha avanzado Sánchez. Pero tanto su intervención como la de los portavoces han tenido un clarísimo sesgo electoral, aunque hablaran de Venezuela o del Brexit. En ninguno de los dos asuntos ha estado bien Pedro Sánchez, según Pablo Casado, que ha censurado a Sánchez por gobernar con decretos leyes "desnaturalizando" el Parlamento. Además, ha sido "devorado" por "comunistas y separatistas". "Ojalá se vaya con tanta paz como descanso deje".

De fondo, el discurso de Albert Rivera ha sido igualmente descalificador de la acción de gobierno pero con otros argumentos, además del habitual de que se apoya en los independentistas. Le ha reprochado al presidente no haber querido llegar a acuerdos, como por ejemplo en Educación, y ha hecho nombramientos alejados de la "capacidad y el mérito", como él piensa hacer si forma Gobierno. No suprimió los aforamientos en la extensión que quería Ciudadanos porque "quería proteger a los corruptos", ha acusado Rivera, que ha preguntado a Sánchez si va a dimitir en el caso de que haya sentencias condenatorias en el caso de los ERE de Andalucía. Las acusaciones se han extendido al expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero por su actuación en Venezuela. Yo no sé cuánto cobra Zapatero, porque solo se me ocurre que sea eso". Y el compromiso: "Yo me comprometo a llevar a la Corte Penal Internacional al señor Maduro”.

El aire de debate del estado de la nación lo han continuado el resto de los portavoces. Joan Tardà de ERC, ha subido a la tribuna recién llegado del Tribunal Supremo donde ha declarado como testigo por la causa del secesionismo en Cataluña. "No debería estar abierta esa causa sino que los demócratas debían estar dialogando para resolver el conflicto con Cataluña", ha deseado el portavoz republicano. El referéndum de autodeterminación para Cataluña, salga lo que salga, es la opción de ERC.

Cataluña quiere "reconocimiento" de su identidad y "poder" para organizarse como sociedad. Esta es la demanda de Carles Campuzano, portavoz del PDeCAT. A lo largo de la historia ha habido acercamientos y diálogo entre las instituciones españolas y representantes del nacionalismo catalán pero siempre "lo ha arruinado la derecha", ha sentenciado Campuzano.

El reconocimiento de una España plural lo ha defendido el diputado de Unidos Podemos Pablo Bustinduy, experto en política exterior, que ha dado su punto de vista sobre el Brexit y Venezuela, diferente al del resto de los grupos de la Cámara pero con argumentos históricos, económicos e ideológicos clásicos de la izquierda.

Con ironía el portavoz del PNV, Aitor Esteban, ha pedido a la presidenta del Congreso, Ana Pastor, que no le llamara al orden porque él sí iba a atenerse a los asuntos establecidos en el orden del día. 

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