Sito Miñanco, acorralado tras su tercera condena
“Es una persona fuerte, que sabe estar a la altura de la situación”, dice su abogado Gonzalo Boye
Después de treinta años a vueltas con uno de los iconos del blanqueo de dinero del narcotráfico en Galicia, la inmobiliaria San Saturnino, vinculada a Sito Miñanco, con sede en Cambados, el pueblo marinero que le vio nacer, la Audiencia de Pontevedra ha conseguido al fin cerrar este espinoso asunto con cientos de legajos del pasado. Su veredicto ha sido condenar al famoso capo gallego con cuatro años de cárcel (dos menos de los que pedía el fiscal) y multa de seis millones de euros que supone un nuevo mazazo para su negro horizonte penitenciario.
A sus 63 años, lo peor de la sentencia para Miñanco —que siempre juró por sus hijas que nunca había tocado la droga— ha sido ver a su vástaga mayor sentada en el banquillo junto a su madre (y exmujer de Sito), y condenadas también como cómplices del lavado de dinero del narcotráfico. Pero Miñanco está decidido a ir a por todas y ha anunciado, a través de su abogado Gonzalo Boye, que recurrirá la sentencia.
El estado anímico de Sito lo ha resumido Boye: "Mi defendido es una persona fuerte y que sabe estar a la altura de la situación pero, obviamente, le molesta ver que se condene a su hija, a su ex mujer y a su ex cuñada por algo que no es delictivo, y, obviamente, vamos a recurrir".
La sentencia desmonta toda la estrategia de defensa de los cinco abogados, sobre todo el de Sito Miñanco que tachó de "guión televisivo" el juicio y solicitó al Tribunal Supremo la revisión de la sentencia por la que fue condenado por primera vez en 1993 por narcotráfico. Un anunció que, sin embargo, no planteó ninguna duda al tribunal sobre la posibilidad de que parte del historial de Miñanco fuese "pirotecnia policial" y lo pasó completamente por alto.
La petición de nulidad de la condena se basa en el dictamen del Tribunal de Estrasburgo por el que diez años después anuló las intervenciones telefónicas ordenadas por el fuera juez instructor, Baltasar Garzón, e impuso una multa al Estado español.
"Sentencia sorprendente"
Sin desvelar cuál será ahora su estrategia en el recurso, el abogado afirma que "la sentencia es sorprendente porque va mucho más lejos que la propia acusación del fiscal, incluyendo hechos que no venían en el escrito de acusación, y además omite la importante prueba practicada, incluida la declaración de los peritos de Hacienda".
Con este juicio, Sito volvió a estar en el foco mediático que tanto ha detestado y dedicó una parte de su declaración para arremeter contra la prensa a la que siempre culpó de sus avatares judiciales: "Todo lo que dicen de mí son mentiras", dijo. Sin apartarse ni un momento de su agua mineral, Miñanco hizo un viaje al pasado, cuando era un respetado tabaquero en Bélgica y Panamá y cajetillas legales en África, para negar que fuese jefe del contrabando y del narcotráfico.
"Estamos ante una realidad paralela, un guión televisivo de la serie Fariña, pero hay que condenar al mito, y este señor, aunque no sea un ejemplo de vida, tiene unos derechos fundamentales y para que este sistema funcione hay que garantizarlos", fue el principal alegato, aunque inútil, de Gonzalo Boye.
Pero la sombra de San Saturnino y el patrimonio que esta empresa gestionaba, como el astillero O Facho, en el que supuestamente se construían las lanzaderas de la coca, sigue persiguiendo a Miñanco. De hecho, la Operación Mito por la que Sito fue detenido en febrero pasado, mantiene bajo secreto una investigación en la que aparecen estas y otras firmas que se mantienen en pie desde los años ochenta.
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