Los Pujol ocultaron más de 70 millones en Andorra
La familia ocultó supuestamente en Andorra un total de 70,4 millones de euros entre 1990 y 2014
El expresidente catalán Jordi Pujol; su esposa, Marta Ferrusola, y los siete hijos del matrimonio ocultaron supuestamente en Andorra un total de 70,4 millones de euros entre 1990 y 2014, según la Policía, que ha enviado al juez de la Audiencia Nacional José de la Mata un nuevo informe sobre estos fondos. La porción más cuantiosa (54,4) corresponde al primogénito del político, Jordi Pujol Ferrusola, ahora en prisión. Los investigadores le atribuyen una “frenética actividad” para blanquear estos “beneficios no justificados”.
Los últimos documentos que el juez instructor ha puesto a disposición de las partes revelan el papel preponderante que supuestamente tenía en la trama de blanqueo Marta Ferrusola, la esposa del expresidente de la Generalitat Jordi Pujol. En un documento bancario de 1995 incorporado al sumario, Ferrusola se presenta en clave ante la banca andorrana como “la madre superiora de la Congregación” y pide el traspaso de “dos misales” —dos millones de pesetas (12.000 euros)— al “capellán”, que los investigadores consideran que es su hijo mayor, Jordi Pujol Ferrusola, encarcelado desde el pasado 25 de abril por tratar de evadir unos 30 millones de euros ocultos en Andorra cuando la investigación sobre él ya había comenzado.
En una carta dirigida a un tal “reverendo Mosen” —el gestor de su cuenta en la Banca Reig, antecedente del banco andorrano AndBank— , la “madre superiora” pide que de su “biblioteca” (su cuenta) se traspasen “dos misales” a “la biblioteca del capellán de la parroquia”.
El último informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía supone un salto cuantitativo respecto a dossieres anteriores con cifras parciales. Los investigadores cifran en al menos 70,4 millones de euros, al cambio actual, los beneficios que la familia Pujol guardaba lejos de la Hacienda española en cuentas del AndBank y la Banca Privada de Andorra (BPA) entre 1990 y 2014.
El informe también da un salto cualitativo: por primera vez los policías consideran abiertamente a “la Familia” (con mayúsculas) como una “organización criminal” que se “coordinó” para “recibir y repartirse desde 1990 y de forma continuada, diversas cantidades de dinero de dudosa procedencia”.
Según el informe dirigido al juez instructor, José de la Mata, Jordi Pujol Ferrusola atesoraba la mayor cantidad de origen supuestamente ilícito: 54,4 millones de euros en pesetas, euros, marcos alemanes, dólares y libras esterlinas. El primogénito tenía, afirman los investigadores, la función de “recepcionar, ingresar y posteriormente dar salida al dinero”, distribuyéndolo entre las cuentas de sus padres, sus hermanos y su exesposa, Mercé Gironés, cuyos fondos suman 3,71 millones de euros.
De estos fondos andorranos, que el expresidente catalán atribuyó al supuesto legado de su padre, Florenci Pujol, al político le corresponden 2,84 millones. A su hijo Josep, le atribuyen 3,52 millones; a Oriol Pujol Ferrusola, 955.253 euros; a su hermana Mireia, 757.708 euros; a Pere, 711.561; a Oleguer, 697.761 euros y a Marta, 695.657 euros en total. Los fondos a nombre de la “madre superiora”, Marta Ferrusola, ascienden al menos a 683.139 euros.
El informe recuerda que varios miembros de la familia supuestamente trataron de introducir estos fondos ocultos en el circuito legal a través de actividades societarias que se extendían más allá de Andorra y que incluían fundaciones en varios paraísos fiscales. Según el escrito, la actuación de la familia “no se ha realizado de forma aislada” sino que “todo responde a un plan preconcebido y ordenado dirigido a la ocultación de grandes sumas de dinero de origen desconocido”.
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