_
_
_
_
_

Cae una gran red de pedofilia que operaba por WhatsApp

La Policía detiene a 39 personas que intercambiaban imágenes de abusos sexuales a menores

Icono de WhatsApp en una pantalla.Vídeo: EFE / EPV
J. J. Gálvez
Más información
Detenido un menor por intercambiar pornografía infantil por WhatsApp
Desarticulado un grupo que difundía fotos pornográficas de chicas por Whatsapp

Al entrar en la casa de uno de los sospechosos, en Lugo, los agentes se toparon con un hallazgo inesperado. "Un diario" —en boca de un agente—, donde el detenido apuntaba el nombre, los apellidos, el lugar y el día que se había citado con sus víctimas. Un listado detallado de menores de edad a los que pagaba por tener sexo. "Con algunos encuentros fechados hace 20 años", recalcan los investigadores de la Operación Tantalio, que anunciaron ayer el arresto de este supuesto pederasta gallego y de otros 38 presuntos pedófilos—16 de ellos, residentes en España y el resto en otros nueve países—. Todos ellos se intercambiaban pornografía infantil a través de 96 grupos de WhatsApp.

"Hemos desmantelado la mayor red internacional de distribución de imágenes de abusos sexuales a menores a través de esta plataforma de intercambio de mensajería", añadió la Policía Nacional, que calificó la investigación como "pionera". Coordinada por Europol e Interpol, esta es la primera acción internacional conjunta contra la pornografía infantil desarrollada en la Unión Europea desde el Grupo de Acción Contra el Cibercrimen, radicado en La Haya. Y se ha saldado, no solo con la captura de 39 personas, sino también con la identificación de 135 usuarios de estos grupos repartidos por 18 países de Europa, Centroamérica y Sudamérica. Ninguna de las víctimas ha sido identificada.

Los agentes han intervenido, además, más de 360.000 fotografías y vídeos de abusos sexuales a bebés y niños, con edades que oscilan desde los dos meses a los ocho años. "Es de lo más denigrante que he visto", recalca Rafael Pérez, jefe de la Brigada de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional: "Hay una exhibición de un esfuerzo físico y sexual hacia los menores que pone los pelos de punta". Los sospechosos habían bautizado los grupos de WhatsApp con nombres tan explícitos como CP —acrónimo de Child Pornography, un término muy utilizado en este mundo—, Porno extremo y Zoofilia. "En estos grupos se intercambiaban hasta 2.000 mensajes al día", apostilla Ángel Sánchez, el inspector jefe que ha liderado la operación.

La investigación arrancó en junio de 2016, cuando la Unidad de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional detectó un enlace en la red que conducía a un grupo de chat para intercambiar pornografía infantil. Fue el primer hilo del que tirar. Esta dirección web conducía a un repositorio donde se daban las instrucciones precisas para acceder a la comunidad de pedófilos de WhatsApp.

Dos arrestados trabajaban con menores

Aunque no se puede dibujar un perfil medio de los supuestos pedófilos cazados en esta operación policial, los investigadores detallan que la mayoría de los detenidos rondaban los 40 años y vivían con sus padres. "Salvo tres o cuatro que residían con sus parejas", apuntan los agentes, que recalcan que dos de los arrestados, en Huelva y Málaga, trabajaban en temas deportivos con menores de edad. "Todos los usuarios capturados se dedicaban a visionar imágenes o a distribuirlas. De momento, no se ha detectado que ninguno de ellos se dedicara a la producción de pornografía infantil", apostillan los agentes, que procederán en las próximas semanas, previa autorización judicial, al análisis del nuevo material incautado en los registros: 10 discos duros y 64 DVD, entre otros.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

"Los usuarios cambiaban los nombres de los grupos. También los iban cancelando y creando otros nuevos", apunta un efectivo de las fuerzas de seguridad. "Los administradores establecían criterios de permanencia, entrada y expulsión en estos chats. Echaban a aquellas personas que no participaban en la conversación o no subían archivos", remacha Rafael Pérez. Los investigadores ya habían visto en otras operaciones algunos de esos vídeos. Otros eran, en cambio, "totalmente nuevos".

"Normalizan el consumo de este tipo de vídeos"

Los arrestos de pedófilos anunciados este martes por la Policía Nacional se producen apenas tres semanas después de que la Guardia Civil revelara que también había lanzado una macrooperación contra la pornografía infantil, denominada Operación Pilumnus, que acabó con el arresto de 102 personas. Entre ellos, un hombre que abusó en las Islas Baleares de, al menos, ocho niños; y otro que grababa en un hotel de Canarias a dos niñas que estaban de vacaciones con la familia.

"Estas personas normalizan el consumo de este tipo de vídeos e, incluso, llegan a normalizar las relaciones sexuales con niños", explica un alto mando de las fuerzas de seguridad españolas, que añade: "Pero su deseo es poder llegar a un menor". "Estoy enfermo. No puedo parar", le dijo a los agentes del instituto armado uno de los detenidos en la operación Pilumnus.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

J. J. Gálvez
Redactor de Tribunales de la sección de Nacional de EL PAÍS, donde trabaja desde 2014 y donde también ha cubierto información sobre Inmigración y Política. Antes ha escrito en medios como Diario de Sevilla, Europa Sur, Diario de Cádiz o ADN.es.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_