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Fallece el hombre que se quemó a lo bonzo en Málaga

La víctima permanecía desde el pasado miércoles en estado grave en un hospital de Sevilla

Entrada de la Unidad de Quemados del Hospital Virgen del Rocio.
Entrada de la Unidad de Quemados del Hospital Virgen del Rocio.Paco Puentes

El hombre hallado en plena calle en Málaga envuelto en llamas el pasado miércoles murió este viernes en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla. Las quemaduras, de tercer grado que presentaba en el 80 por ciento de su cuerpo le provocaron un fallo multiorgánico que no pudo superar, según indicaron fuentes sanitarias.

Dos días ha tardado el Cuerpo Nacional de Policía en identificar a la víctima, que llevaba todo este tiempo hospitalizada. El fuego afectó a parte de sus huellas dactilares lo que dificultó las tareas de reconocimiento. Tras el suceso, ocurrido el pasado miércoles por la tarde, ingresó en el hospital Carlos Haya de la capital malagueña, a escasos metros de donde se produjo el incidente. Horas después, ya en la madrugada del jueves, fue trasladado al centro sanitario de la capital hispalense, donde permaneció en la Unidad de Grandes Quemados hasta que falleció a última hora de la tarde.

Los investigadores han confirmado que se trata de A. H. A., natural de Ceuta, donde nació en enero del año 1955. Los investigadores tratan ahora de localizar a los padres del fallecido ya que no consta, en ningún registro, que tuviera domicilio en la provincia de Málaga. Según el testimonio de los que le conocían, el hombre se dedicó durante varios años a trabajar en la construcción. La crisis económica provocó que perdiera su empleo. Desde hace meses era el aparcacoches ilegal de un solar donde acudía cada tarde y donde pedía “la voluntad”.

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Los agentes mantienen abierta la investigación para esclarecer lo ocurrido. Las hipótesis que se barajan pasan por que se prendiera fuego a lo bonzo, tal como sostienen algunos de los testigos, o que se tratara de un accidente cuando iba a encender un cigarrillo.

A.H.A. había comprado una cajetilla de tabaco Ducados rubio en el quiosco situado a las puertas del hospital malagueño, en la avenida Carlos Haya de la ciudad, apenas unos minutos antes del suceso. Según detalló el propietario del puesto, Francisco Nieto, solía acudir cada día allí antes de dirigirse al escampado donde vigilaba los coches. Aquella tarde también había estado en las Urgencias del hospital porque había sufrido, al parecer, un ataque de ansiedad provocado, posiblemente, por la asfixia económica.

“Solíamos tener conversaciones y él me dijo que estaba muy agobiado por las deudas” afirmó el vendedor de prensa. El miércoles, sobre las seis de la tarde, el fallecido pidió su tabaco y pagó con un billete de cinco euros, lo que extrañó al dueño del pequeño establecimiento. “Siempre me daba los cuatro euros exactos de la cajetilla”. Pero el cliente pidió también un mechero.

La víctima se despidió del quiosquero, pasó junto a la parada de taxis de la calle del Ciprés y fue en la acera contraria, menos concurrida, donde prendió fuego su ropa. Los taxistas fueron los primeros en auxiliar al hombre con los extintores de sus vehículos. “Era una bola de fuego y se retorcía de dolor en el suelo” aseguró uno de los testigos. Un vecino alertó a los servicios de emergencia y a la policía, pero estos llegaron tarde porque se confundieron de calle, según otro testigo.

Los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Málaga no tenían constancia de que el fallecido solicitara algún tipo de ayuda. La policía estaba dispuesta ayer a distribuir, por los albergues municipales, el retrato del fallecido para intentar localizar a algún familiar. Pero una vez identificado, los agentes buscarán ahora en Ceuta a los progenitores, que tendrán que decidir si trasladan el cadáver desde Sevilla hasta su ciudad natal.

Las personas que se relacionaban con la víctima aseguraron que éste les comentó que estaba casado y que tenía dos hijos. Sin embargo, la policía no tiene constancia de que el hombre tuviera esposa o descendencia. En primera instancia, los investigadores sospecharon que podría tratarse de un indigente que solía frecuentar la zona donde se produjo el incendio. En el comunicado remitido ayer por la Comisaría Provincial de Málaga ya no se hacía referencia a este extremo.

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