El PP piensa ya en minimizar el desgaste en Euskadi y Galicia

El PP quiere alcanzar una velocidad de crucero, o al menos dar esa sensación. Cinco meses después de las elecciones generales y a los dos meses del congreso de Sevilla, en el que renovó su cúpula, la dirección del partido asegura que la maquinaria interna por fin se ha puesto en marcha. Sobre todo, con vistas a la celebración de los cónclaves regionales, que empiezan este fin de semana en Madrid, y, más a largo plazo, para preparar las elecciones vascas y gallegas de marzo de 2013.

Con Mariano Rajoy en La Moncloa y un poder autonómico sin precedentes, los dirigentes populares se esfuerzan por transmitir una idea de actividad incesante que, de momento, aún no se ha visto reflejada en los hechos o no ha trascendido más allá de los apoyos rutinarios al Ejecutivo y los ataques al PSOE. En cualquier caso, todos los mensajes de las últimas semanas van en esa dirección.

Lo ha explicado la secretaria general, Dolores Cospedal, quien en público no se cansa de recordar “el proceso de renovación interna” y el calendario de los congresos autonómicos y provinciales, salvo Andalucía, Asturias y Galicia, cuyas fechas aún no están cerradas. Y lo repite cada vez con más intensidad Carlos Floriano, vicesecretario de Organización y Electoral: la principal función del PP en esta etapa es defender al Gobierno, sus medidas y los recortes. De ahí que, pese a que algunos ministros lamentan un respaldo demasiado tibio, el partido haya anunciado una campaña para vender los recortes de forma sistemática en todo el país y ayer haya lanzado el vídeo #nohandejadonada, en el que acusan al PSOE de no haber dejado ningún margen de actuación a Rajoy.

Para conjurar una posible sensación interna de desgobierno, además, los anuncios de Cospedal y Floriano, las caras más visibles de la cúpula, han ido más allá en los últimos días. Ahora se habla ya de elecciones. Tras esa victoria que sabe a derrota en Andalucía, el objetivo es comenzar a trabajar para minimizar el desgaste en el País Vasco y en Galicia, que celebran los comicios autonómicos el año que viene. Aunque algunos dirigentes ya mencionan las catalanas y las europeas de 2014. “Con estos objetivos vamos a trabajar a partir de ahora”, aseguran.

Será precisamente la vicesecretaría que dirige Floriano la encargada de coordinar las fuerzas del partido en la organización electoral y, para ello, impulsará un departamento de actos públicos que pretende dirigir la actividad territorial del partido bajo “la misma imagen y el mismo mensaje”, y reforzará también las actividades del PP en el exterior con la vista puesta en los gallegos residentes en el extranjero.

Este interés por las autonomías responde, por otro lado, al descontento de varios barones, que —como deslizaron, en algunos casos, cuando no trasladaron abiertamente a la cúpula en la última reunión celebrada en Génova— se sienten culpabilizados en exceso por el déficit desbocado de sus Administraciones, que al final incide en las previsiones del Estado.

Y, aunque Rajoy lo ha dejado bien claro en más de una ocasión, recordando que él es el responsable último de todas las cuentas públicas, no ha podido evitar que se extendiera cierto malestar e inquietud entre los líderes regionales. Será este el clima en el que se celebren, hasta finales de junio, los congresos del partido.