Los socialistas plantean subvencionar empleos en vez de abaratar despidos

“Vamos a subvencionar la contratación con recursos públicos en vez de abaratar más el despido”. Inmaculada Rodríguez Piñero, cabeza de lista de la lista del PSOE al Congreso por Valencia, demostró ayer en un desayuno con empresarios convocados por la Cámara de Comercio y Cierval por qué es la redactora del programa económico que defiende Alfredo Pérez Rubalcaba en las próximas elecciones.

Rodríguez Piñero lamentó la falta de liderazgo en el seno de la Unión Europea, “sobre todo de Alemania”, para atajar una crisis que, a la postre, todos hemos importado de la falta de regulación del sector financiero en Estados Unidos. Asumió que la situación española es más complicada a raíz de la burbuja inmobiliaria que contamina los balances de todos los bancos y cajas. Y presentó los cuatro ejes del programa socialista.

“No se puede usar la crisis para debilitar el Estado del bienestar”

Nuevos impuestos sobre las grandes fortunas o para las entidades financieras y un agresivo combate contra “el fraude fiscal organizado” a través de una oficina específica deberán compensar la rebaja de la carga impositiva que arrastran las pequeñas empresas y sostener los servicios públicos. “No se puede utilizar la crisis como excusa para debilitar nuestro Estado del bienestar”, sentenció la candidata.

Los bancos y cajas serán sometidos a mayores controles y las malas prácticas serán sancionadas. Por contra, una ley de insolvencia personal regulará la situación de las familias que no puedan pagar su hipoteca.

La apuesta por la productividad y el fomento empresarial no es sino la antesala del primer objetivo, crear empleo.

Rodríguez Piñero no dejó de apuntar la ruinosa situación de la Generalitat: “La deuda para financiar obras faraónicas muy poco rentables es incompatible con la austeridad que proclama Rajoy y no ha mejorado nuestro nivel de renta”. Y respondió sin titubear a una pregunta sobre la supuesta discriminación de los valencianos en materia de financiación autonómica: “No hay sistema de financiación que soporte la mala gestión y el despilfarro”.