Ir al contenido
_
_
_
_
editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

La impostura de Mazón

La arrogancia del presidente valenciano sobre su papel el día de la dana ofende a las víctimas y lastra toda la política autonómica

El País

El debate del estado de la Comunidad Valenciana, celebrado esta semana, ha servido para comprobar hasta qué punto el presidente autonómico, Carlos Mazón, vive en un estado de negación respecto a su falta de credibilidad como gobernante por su incomparecencia el día en que 229 de sus vecinos fallecieron ahogados por una riada de la que su Gobierno no alertó a los ciudadanos. En cinco horas de discurso —más de siete en total contando las réplicas—, no encontró tiempo para explicar qué estaba haciendo en la tarde del 29 de octubre de 2024 mientras miles de personas desbordaban los teléfonos de emergencias pidiendo ayuda. Once meses después de la catástrofe, el mandatario popular confirma con su silencio que lo que fuese que estuviera haciendo aquella tarde le da más vergüenza que el esperpento en el que ha convertido su presidencia.

Por mucho que se empeñe Mazón, toda la política valenciana vive pendiente de esa cuestión. El presidente estuvo comiendo en un restaurante durante cuatro horas sin mostrarse preocupado por la emergencia, según la versión no desmentida de la periodista que lo acompañó, y desapareció durante dos horas más hasta llegar al centro de coordinación de la emergencia a las 20:28. El silencio de Mazón sobre lo que ocurrió en esas horas, protegido por una indigna omertá institucional, es una falta de respeto a los damnificados —y a toda la ciudadanía valenciana— incompatible con el desempeño de su cargo.

Carlos Mazón arruinó todo su crédito político cuando, en medio del trauma colectivo, respondió de forma altiva y sin un ápice de autocrítica a la mayor tragedia de la Comunidad Valenciana. Nunca ha bajado el tono. Este martes, una representación de las víctimas de la dana presente en el debate de Les Corts tuvo que escucharle defender su negligente gestión, mofarse de los responsables de la Confederación Hidrográfica del Júcar y de la Aemet, criticar el “relato injurioso” contra su Consell y, además, decir que siempre ha tenido para los afectados “la mano tendida” y “la puerta abierta”. Las víctimas abandonaron el pleno ofendidas por las mentiras.

El descaro de Mazón crece cada día a pesar de las revelaciones de la juez que investiga la posible responsabilidad penal del Gobierno autonómico en las muertes por la riada. La jueza de Catarroja —cuya instrucción ha sido respaldada por la Audiencia de Valencia y está dejando en evidencia las medias verdades y ocultaciones del Consell sobre aquellas horas fatídicas— ha invitado ya tres veces al presidente a declarar voluntariamente como testigo. Sin éxito. Sus autos permiten intuir que, si no estuviera aforado por su cargo, él sería uno de los imputados junto a la consejera de Interior y al director de Emergencias.

Mazón ignora esta realidad para, desafiante, presentarse no solo como un presidente al frente de la reconstrucción, sino como apuesta de futuro. La razón de fondo por la que su partido no le ha dado la espalda es no abrir una crisis interna en la Comunidad Valenciana: detrás de Mazón, que gobierna gracias a Vox, no hay nombres ni un proyecto claro. Ese cálculo electoral, sin embargo, hace al Partido Popular cómplice de una impostura que no merecen los valencianos. Y que ya dura demasiado.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_