Movilización por una goma verde
Somos sentimientos y tenemos seres humanos, que diría Mariano Rajoy. Las redes sociales lo saben y lo explotan
No todo iba a ser bronca. La comunidad tuitera ha participado en los últimos días en un juego inocente, sin heridos. Se trataba de citar algo que los más jóvenes no comprendieran. Famosos y no famosos se sumaron con entusiasmo al reto. Las respuestas, muy variadas, hablaban de un tiempo donde no existían las plataformas de pago, sino el videoclub, es decir, los VHS y las multas por no devolverlos a tiempo; cuando las televisiones no tenían mando a distancia y no se hacía moviola en directo de sus programas en las redes sociales.
Hubo quien recordó series que ya no existen citando frases de sus protagonistas: “Me encanta que los planes salgan bien”; “Kitt, te necesito”; “Chanquete ha muerto”; “Al oeste de Filadelfia crecía y vivía sin hacer mucho caso a la policía”. Otros evocaron viejos dibujos animados, cuando un inspector decía de repente: “¡Adelante gachetobrazo!” y una piña que hablaba respondía al nombre de “Gazpacho”. Los guiños generacionales incluían canciones: “Sacatán sacatún tan tan tan que sun dun pen que tun pan que tepe tepe tan cometún que sun dun que tun ¡uh ah!”; “Borriquito como tú, tururú...”; anuncios: “Hola, soy Edu, feliz navidad”; “Busco a Jacks”; “Tenemos chica nueva en la oficina, se llama Farala y es divina”; grupos que se disolvieron (“New Kids on the block”); revistas que desaparecieron (“Superpop”) y objetos que se extinguieron (“walkman”; “carrete”) o que utilizamos para otras cosas, como “el bic naranja escribe fino y el bic cristal escribe normal”, que servía para rebobinar “casetes”. Como están muy cerca, la nostalgia se mezclaba a veces con amargura y melancolía: “¿Algo que la gente joven no entienda? “Trabajo estable, salario digno, vivienda propia”, contestó, por ejemplo @Martattackss.
trabajo estable salario digno vivienda propia https://t.co/lHTVtFa6z4
— bernikolashnikova (@maptatakc) January 4, 2022
En todo caso, la morriña cotiza al alza en Twitter. La cuenta @yofuiaEGB, que difunde cada día imágenes de lo que veíamos y merendábamos, cuenta con más de 243.480 seguidores. La de @cachitos_tve, que supera los 90.900, hace lo propio con actuaciones musicales del archivo de la televisión pública. Y las redes sociales se movilizaron como ellas saben para evitar recientemente la desaparición de una goma de borrar de color verde. La casa Milan la había quitado de su catálogo y la comunidad tuitera puso el grito en el cielo. “¡Eliminad el verde de los semáforos si queréis, pero la goma verde de Milan, no! Save Green Milan. Pray For Green Milan”, rogaba @GabrielBS82; “Empieza fuertecito 2022″, lamentaba al enterarse @Carrington_BIO con una pandilla de emojis llorosos. “No me dais más que disgustos. ¿Quién no ha mordido una goma Milán? ¿Quién no ha tenido que ir al médico por comerse una goma Milán?”, recordaba @calixtaymelibea. Surgieron especuladores vendiendo la “reliquia” a 10 euros. Alguno llevó el asunto más lejos: “Me caso con quien me regale una goma de borrar verde de Milan”. Finalmente, la empresa hizo un comunicado: “Los estudios de mercado nos indican que este las prefiere mayoritariamente en color blanco o rosa, pero por supuesto que si el mercado demanda las de color verde ¡estaremos encantados de fabricarlas!”. Victoria. Ahora solo faltaba encontrar un lápiz.
El juego inocente de decir algo que los jóvenes no comprendieran lo promovía Badabun, canal mexicano con 45,3 millones de suscriptores en Youtube. Se estrenaron con el vídeo “10 cualidades que todo hombre desea en una mujer” y su formato estrella es “Exponiendo infieles”, donde se pide a una pareja revisar sus móviles a cambio de dinero. Somos sentimientos y tenemos seres humanos, que diría Mariano Rajoy. Y lo saben.
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