_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Elogio

Muchos indigenistas parece que preferirían reducir nuevamente el mundo a Europa, África y Asia, ya que dan por supuesto que América estaba mucho mejor cuando no existía

AMLO Mexico
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.GUSTAVO GRAF MALDONADO (Reuters)
Félix de Azúa

Hay un célebre chocolate en polvo que no ha logrado disolver su harina de cacao en la leche, de modo que basa la publicidad en alabar los grumos que flotan como náufragos en el líquido tras removerlo con la cuchara. En sus anuncios aparecen niños gordos y hermosos bebiendo con deleite los coágulos flotantes, como si esa fuera la parte buena de su desayuno.

Lo mismo sucede con reaccionarios ontológicos como López Obrador cuando exige perdón a los españoles por haberle traído a la existencia. Muchos indigenistas parece que preferirían reducir nuevamente el mundo a Europa, África y Asia, ya que dan por supuesto que América estaba mucho mejor cuando no existía. Como casi todas las exigencias de la izquierda reaccionaria, muestran un profundo rencor contra el mundo, contra los humanos, contra lo que hay, contra todo lo que no comprenden.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Ya sucedió algo similar en el siglo XVIII, cuando comenzó a ser frecuente que la gente ilustrada e inteligente dejara de creer en el Dios de las iglesias. Alarmados, los que entonces formaban la izquierda reaccionaria pidieron a las autoridades que no prohibieran las religiones supersticiosas, ya que, decían, con ellas la gente analfabeta se quedaba más tranquila. Que hubiera un juicio final apaciguaba la sed de venganza.

También hoy en día se da un fenómeno de devoción oficial y farisaica. La ausencia de religión y el declive de la popularidad eclesiástica, deslustrada por su sexualidad y la codicia inmobiliaria, ha hecho posible una religión que enmiende las injusticias, a sabiendas de que ningún juicio final las remediará. Esa piedad laica, inventada, como es lógico, por los norteamericanos, difunde una fe en la cultura indígena y mágica que quiere dar esperanzas a aquellas agobiadas minorías que se creen colonizadas por la biogenética. Son los elogios del grumo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Félix de Azúa
Nació en Barcelona en 1944. Doctor en Filosofía y catedrático de Estética, es colaborador habitual del diario El País. Escritor experto en todos los géneros, su obra se caracteriza por un notable sentido del humor y una profunda capacidad de análisis. En junio de 2015, fue elegido miembro de la Real Academia Española para ocupar el sillón "H".

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_