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Ignacio Gaspar, director de Toy Planet: “El juego debe ser libre y el género lo ha condicionado innecesariamente”

La empresa de juguetes lleva 11 años defendiendo la igualdad entre niños y niñas en su catálogo navideño. El empresario defiende que los artículos no se fabrican por sexo, sino que se ha fallado en la manera de comunicar

Ignacio Gaspar Toy Planet
Ignacio Gaspar es director general de Toy Planet. Su catálogo de juguetes lleva 11 años apostando por la igualdad entre niños y niñas.Toy Planet
Carolina García

La Navidad es la época del año en la que los españoles compran más juguetes. El 75% de las ventas se concentran en estas fechas, según la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes. Un dato que hace de esta época la ideal para educar en igualdad desde edades muy tempranas, algo propiciado también para poder hacerlo mediante el juego. Pero, ¿por qué un niño solo puede divertirse con camiones y las niñas solo con muñecas? Esta pregunta es la que se hicieron hace unos 11 años los responsables de Toy Planet, cadena de jugueterías detallistas y encargados del popular catálogo navideño que lucha contra los estereotipos de género en los juguetes. Entre sus páginas, niños y niñas juegan juntos a ser mecánicos, a hacer las tareas de casa, a ser bomberos o a cuidar de sus bebés.

“La iniciativa comenzó en nuestras redes sociales y fue todo gracias a nuestra comunidad de seguidores. Nuestros clientes empezaron a hacer comentarios del tipo: ‘Oye, ¿por qué siempre tiene que salir la niña con el carrito? ¿Por qué siempre un niño con herramientas?”, recuerda Ignacio Gaspar, director general de la compañía juguetera, por teléfono. Según argumenta, fue a base de ir recibiendo mensaje tras mensaje y escucharlos y atenderlos cuando llegaron a la conclusión de que estas personas tenían razón y en el sector iban un poco a destiempo y no estaban dejando que los niños y niñas eligieran los juguetes libremente.

“Entendimos entonces que el juego debía ser libre de género y, además, como creemos que los juguetes van más allá de un bien de consumo, era necesario que no se vieran condicionados por nada, y menos por el sexo del menor”, prosigue. Modificaron su catálogo y el éxito fue masivo: “Desde que empezó la campaña hace ya 10 años, si cogemos solo los de Navidad, hemos impreso unos 12 millones de catálogos, y el tercer año de esta campaña nos llamaron de 25 países distintos para informarse de la medida. Ese año fue cuando entendimos que estábamos haciendo algo importante”. Gaspar es consciente de que no toda la culpa del sexismo la tiene el sector juguetero. “Pero si podemos poner nuestro grano de arena para que se produzca el cambio, para acabar con los estereotipos en los juguetes, pues lo hacemos”.

Cambiaron solo las fotos de los productos de producción propia, pues, según cuenta, en las que reciben de proveedores nacionales no pueden meter mano. Gaspar reconoce que no fue fácil porque también tuvieron comentarios negativos: “Voy a llamarles primarios. Personas que decían barbaridades acerca de la medida y que, obviamente, ignoramos porque el fin era más importante. Y al ser conscientes del déficit que existía en el sector sobre cómo fomentar la igualdad preferimos pecar por exceso que por defecto”.

El juego debe ser libre. Niños y niñas pueden jugar a lo que quieran.
El juego debe ser libre. Niños y niñas pueden jugar a lo que quieran.Toy Planet

A pesar de ser pioneros, no son los únicos que están luchando para acabar con los estereotipos de género en los juguetes. El pasado mes de noviembre, el Ministerio de Consumo y el sector juguetero publicaron un código deontológico que deben seguir los publicistas de juguetes y que prohíbe que muestren sus productos para uno u otro sexo o sexualizarlos. Este reglamento afecta a los anuncios nuevos y entró en vigor el 1 de diciembre. “El reglamento ya existía y lo que se ha hecho es modificar un punto, que es el que incide más en evitar el sexismo a la hora de vender o comunicar”, detalla el director de Toy Planet.

La publicidad bien dirigida puede cambiar los hábitos de consumo. Así lo afirma Gaspar. ¿Ha tardado esta medida? “Hombre, pues normalmente la sociedad y las empresas privadas suelen ir por delante de la Administración Pública, en nuestro caso gracias a nuestros clientes”. “Este reglamento”, prosigue, “va a ayudar a que la publicidad se autorregule y establece un compromiso del sector para que se lleve a cabo”.

Los juguetes no tienen género. La publicidad deja atrás el sexismo en los anuncios dirigidos a niños.
Los juguetes no tienen género. La publicidad deja atrás el sexismo en los anuncios dirigidos a niños.Toy Planet

Aunque todavía queda mucho por hacer. “Lo ideal sería, por ejemplo, que nuestro catálogo en vez de tener 200 páginas tuviera 500. Y que en cada artículo, cada juguete, saliera un niño y una niña a la vez”. El juguete también tiene una función social, por lo que aquí los padres y madres tiene mucho que decir: “Los progenitores deben aceptar y respetar los gustos de su hijo, hay niños que quieren ser matronas o enfermeras y es perfecto. Y al revés, que siempre vamos hacia lo femenino, o una niña que quiere ser mecánica. Pues dejémosla”. Lo esencial es no condicionar al menor.

El objetivo es que el juego sea libre y una de las variables para que no se haya dado es el género que lo ha condicionado innecesariamente: “Sobre todo se debe, e insisto, a la forma de comunicar el juguete. A mí me preguntan mucho, ¿pero entonces ahora no se van a hacer juguetes para niños y niñas? No se han producido nunca, esa es mi respuesta. El error ha sido en cómo los hemos comunicado, los hemos publicitado. Y creo que en Toy Planet hemos sido los primeros y hemos fomentado una parte importante de esa labor de comunicación, de esa labor educadora en igualdad tan necesaria”.

¿Cómo elegir el mejor juguete?

Ignacio Gaspar, juguetero y director general de Toy Planet, recuerda que para elegir el mejor juguete lo primero que hay que tener en cuenta es la edad de su destinatario: “Es vital. En estos casos recuerdo siempre la frase de una compañera que ya se ha jubilado que decía: los padres siempre compramos en grande. Todos creemos que nuestros hijos son los más listos, y le compramos juguetes antes de tiempo”.

Según sus recomendaciones, los progenitores han de primar y ser conscientes de las actitudes que tiene su hijo y fomentarlas, o de las que carece y le gustaría que tuviera: “Aquí el juguete tiene mucho que decir. Por ejemplo, mi hijo pasa poco tiempo en familia, pues busquemos un juego de mesa para disfrutar juntos; o mi hijo está cogiendo peso porque es muy sedentario, pues una comba o una pelota”.

“Los padres tienen que ser conscientes de que España cuenta con dos fechas muy importantes de juguetes y muy juntas, que son Papá Noel y los Reyes Magos”, prosigue Gaspar. Esto puede dar la sensación de que se carga mucho a los niños de juguetes. “Hablar de la cantidad correcta sería un poco atrevido, pero, cualitativamente, lo mejor es que haya un surtido de juguetes de distintas familias, que no todo sean figuras de acción o muñecas, sino que sean distintos y que fomenten la creatividad o la imaginación, como las manualidades, por ejemplo. Y sin olvidar, muy necesario en mi opinión, incluir algún juego de mesa que permite pasar tiempo de calidad en familia”.

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Carolina García
La coordinadora y redactora de Mamas & Papas está especializada en temas de crianza, salud y psicología, y ha desarrollado la mayor parte de su carrera en EL PAÍS. Es autora de 'Más amor y menos química' (Aguilar) y 'Sesenta y tantos' (Ediciones CEAC). Es licenciada en Psicología, Máster en Psicooncología y Máster en Periodismo de EL PAÍS.

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