El Tribunal Electoral de Guatemala niega la inscripción para participar en las presidenciales a dos candidatos críticos con el Gobierno

El Tribunal Electoral de Guatemala ha negado la inscripción para participar en las elecciones presidenciales previstas para el próximo junio a dos voces críticas con el Gobierno del presidente Alejandro Giammattei. Se trata de la líder indígena Thelma Cabrera y el exprocurador de Derechos Humanos Jordán Rodas, quienes presentaron sus candidaturas a la presidencia y vicepresidencia por el Movimiento de Liberación de los Pueblos, una organización política antisistema, de izquierda, que aboga por el reconocimiento de los derechos indígenas y una renovación del Estado guatemalteco. Las autoridades electorales han alegado que Rodas tiene pendiente investigaciones de parte de la Contraloría durante su gestión como procurador, aunque el candidato afirma que cuenta con todos los requisitos establecidos por la ley electoral guatemalteca y ha denunciado la posibilidad de un “fraude” en los comicios. “Las mafias organizadas pretenden dejar fuera a una de las candidaturas decentes de las elecciones”, ha dicho Rodas. “Es inaudito que el TSE rechace nuestra inscripción. La democracia en Guatemala ha retrocedido otro paso, le temen al pueblo y sus decisiones soberanas”, ha afirmado.

La decisión ha generado revuelo en Guatemala, un país que inicia el proceso electoral con la inscripción de candidaturas, pero sumido en una profunda crisis política: la nación centroamericana, que protagonizó una primavera democrática, ha visto cómo jueces y fiscales que lucharon contra la corrupción marchan al exilio, se impone la impunidad, mientras el presidente Giammattei lanza una cacería contra las voces críticas con su Gobierno, como ha ocurrido con el encarcelamiento del periodista José Rubén Zamora. El fallo del Tribunal Electoral, hecho público el fin de semana, ha levantado alertas entre organizaciones internacionales de derechos humanos. “Todos los candidatos deben tener la posibilidad de inscribirse y participar de las elecciones en iguales condiciones. Estas decisiones afectan los derechos políticos de los votantes y los candidatos, que están protegidos por el derecho internacional”, ha escrito Juan Pappier, subdirector para las Américas de Human Rights Watch. “Las restricciones a derechos políticos deben respetar estándares internacionales y basarse en criterios objetivos y razonables. La sola presentación de una denuncia penal, sobre hechos que aún no han sido investigados, no es motivo suficiente para excluir una candidatura”, ha advertido el activista.

El Tribunal Electoral afirmó en su resolución contra las candidaturas del MPL que Rodas, aunque presentó la llamada Constancia Transitoria de Inexistencia de Reclamación de Cambios, un finiquito que la ley exige a todos los funcionarios que aspiran a un cargo de elección. Rodas afirma que ha presentado el documento, pero según las autoridades hay pendientes “reparos” o investigaciones de parte de la Contraloría guatemalteca durante su gestión como procurador. El MPL presentó un recurso contra el fallo, a la vez que ha llamado a sus bases a movilizarse. Este lunes se registró una manifestación contra la decisión en la sede del Tribunal Electoral en la capital guatemalteca. “Thelma y Jordán inscritos quedarán”, gritaban los manifestantes.

Cabrera y Rodas anunciaron en diciembre la decisión de participar en las presidenciales. La líder indígena maya es una destacada defensora de los derechos humanos y ya aspiró a la presidencia en las pasadas elecciones, cuando sorprendió al obtener el cuarto puesto en la primera vuelta, con más de 450.000 votos, aunque no fue suficiente para pasar a la segunda ronda. Esta fue disputada por Alejandro Giammattei y Sandra Torres, quien perdió la elección. Rodas, por su parte, ha logrado reconocimiento internacional por su lucha contra la impunidad durante el Gobierno del expresidente Jimmy Morales y la actual Administración de Giammattei.

En una entrevista con EL PAÍS en agosto pasado, realizada en Ciudad de Guatemala días antes de que dejara su cargo, Rodas criticó con dureza a la clase empresarial guatemalteca, a la que acusa de financiar la persecución contra jueces y fiscales que han luchado contra la corrupción y la impunidad en ese país. También fue duro con el presidente Giammattei. “A veces me da la impresión de que somos masoquistas y que Guatemala es como un parqueo [estacionamiento] subterráneo, porque yo pensé honestamente que con Jimmy Morales habíamos tocado fondo, pero Giammattei es igual de corrupto e irrespetuoso con los sectores más vulnerados, como por los pueblos indígenas”, dijo en esa ocasión. Rodas calificó también de “muy malo” el Gobierno del mandatario: “Tanto tiempo de prepararse para ser presidente. No formó equipos, no hizo políticas públicas para favorecer a los más necesitados. Él dijo una frase un poquito vulgar, que no quería ser recordado como un hijo de puta más, pero yo pienso que a la larga mucha de la población precisamente va a pensar eso”.

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