Scholz destaca la unión de la UE y la OTAN ante la guerra “imperialista” de Putin en Ucrania
El canciller subraya en el mensaje de Año Nuevo que Alemania no se deja chantajear por Moscú y pide a los ciudadanos cohesión ante las dificultades derivadas del conflicto
“Termina un año difícil”. El canciller alemán, Olaf Scholz, ha arrancado con esta frase su mensaje de Año Nuevo, centrado en la guerra que inició Rusia contra Ucrania en febrero. “Ningún repaso del año está completo sin las imágenes del 24 de febrero, cuando los primeros misiles rusos alcanzaron Kiev, Járkov, Odesa y otras ciudades ucranias al amanecer. Putin está librando una guerra imperialista de agresión, justo en medio de Europa”, dijo Scholz en su mensaje, cuyo texto fue distribuido con antelación a la prensa.
“Sin embargo, la historia del año 2022 no es solo guerra, sufrimiento y dolor”, añadió el canciller. Ha sido un año en el que se ha mostrado “cohesión y fuerza, y sí, también confianza”. El mejor ejemplo de ello, según Scholz, es la cohesión de la Unión Europea y la OTAN, más unidas de lo que lo han estado en mucho tiempo. “La guerra de Ucrania no causó divisiones en la OTAN y la UE, sino que las unió como nunca. Tampoco Alemania se doblegó cuando Rusia cerró el grifo del gas en verano, porque no nos van a chantajear”, subrayó.
Scholz se refirió también a los errores de cálculo de Moscú en el contexto de la guerra de Ucrania. El presidente ruso, Vladímir Putin, creyó que podía librar una ofensiva de pocos días, pero no ha logrado su objetivo. “Los ucranios defendieron valientemente su patria, también gracias a la ayuda alemana”, dijo Scholz, quien se comprometió a seguir apoyando a Ucrania.
“Este punto de inflexión en el tiempo es una dura prueba”, afirmó, “y mucha gente está preocupada por la guerra. Lo sentimos por los ucranios, que incluso en días como hoy no tienen paz frente a las bombas y misiles rusos”. “Y todos sentimos las consecuencias de esta guerra también en nuestra vida cotidiana: al hacer la compra en el supermercado, en la gasolinera o al pagar la factura de la luz o el gas”. añadió en referencia a las preocupaciones de los alemanes en torno a las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania.
Alemania es un “país fuerte”, destacó el líder socialdemócrata. “Un país que trabaja con energía y rapidez hacia un futuro bueno y seguro. Un país que resiste, especialmente en tiempos difíciles. Un país en el que no dejamos a nadie atrás, independientemente de si vive en la ciudad o en el campo, de si es viejo o joven, de si tiene una buena posición económica o menos, de si nació aquí o llegó más tarde”, apuntó.
El canciller también recordó las medidas contra la inflación y que las nuevas desgravaciones para los ciudadanos entrarán en vigor ya este domingo: la ampliación del subsidio de vivienda, el aumento de las prestaciones por hijos a cargo, deducciones fiscales por valor de 19.000 millones de euros y topes de precios para los costes de la electricidad, el gas y la calefacción urbana.
“Nuestra cohesión es nuestro mayor activo”, concluyó Scholz, “sigamos juntos también el año que viene”.
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