Muere un ‘casco azul’ irlandés en el ataque de una multitud a su convoy en el sur de Líbano

Un militar irlandés de la misión de cascos azules en Líbano, que comanda un general de división español, ha muerto y otro se encuentra en estado crítico tras haber sido atacados por una “multitud hostil” con armas de fuego cuando viajaban hacia Beirut en un vehículo acorazado en la noche de este miércoles, ha informado el ministro de Defensa irlandés, Simon Coveney. Hay otros dos militares hospitalizados con heridas leves.

Los militares se desplazaban en un convoy de dos vehículos acorazados, con cuatro personas en cada uno. En la zona de Al Aqbie ―fuera del área de operaciones de la misión, pero aún en el sur del Líbano―, el convoy quedó dividido y una “muchedumbre hostil” rodeó uno de los vehículos, ha explicado Coveney a la cadena pública nacional RTE. “Hubo disparos. Desafortunadamente, uno de nuestros cascos azules murió”, ha señalado. Se trata de Seán Rooney, de 23 años. Los disparos fueron efectuados con armas ligeras, según el ejército irlandés. El vehículo, con matrícula de la misión, se puede ver en fotografías volcado y con la luna trasera rota.

El herido crítico ―identificado como Shane Kearney, de 22 años― está en un hospital gestionado por Naciones Unidas, en el que ha sido operado de urgencia. Las cuatro personas que iban en el otro vehículo salieron indemnes.

Coveney, también titular de Exteriores, ha admitido que ha habido en los últimos meses “cierta tensión en el terreno entre las fuerzas de Hezbolá [el partido-milicia chií] y la FINUL”, como se llama esta misión de mantenimiento de la paz de la ONU. “Pero nada como esto”, que ha sido inesperado, ha matizado.

En declaraciones a la agencia Reuters, un dirigente de Hezbolá, Wafiq Safa, ha pedido que no se responsabilice a su grupo de los hechos, porque ha sido un “incidente involuntario entre residentes de Al Aqbie y la unidad irlandesa”. Las Fuerzas Armadas libanesas no han ofrecido detalles en su comunicado de pésame, mientras que el primer ministro, Nayib Mikati, ha pedido a todas las partes que muestren “sabiduría y paciencia”.

Pocos datos

La ONU ha iniciado una investigación, en coordinación con las Fuerzas Armadas del país. “De momento, los detalles son escasos y contradictorios”, ha señalado en un comunicado, en el que sitúa el incidente “justo fuera del área de operaciones de la FINUL en el sur del Líbano”. Dos miembros del convoy estaban de permiso por el fallecimiento de familiares. Por eso se dirigía hacia el aeropuerto de Beirut, para que volasen a Irlanda, ha precisado el jefe del Estado mayor del país, Seán Clancy.

Es el primer militar de la misión que pierde Irlanda en dos décadas. Pertenecía a un batallón de infantería de 333 soldados del país desplegado el mes pasado e integrado en uno multinacional en el que participan también malteses, polacos y húngaros, según se precisa en el comunicado de su ejército.

La FINUL, formada por unos 9.500 militares y poco más de 800 civiles de medio centenar de países, fue creada en 1978 para confirmar la retirada israelí de Líbano. Tuvo que reajustar su mandato en 1982, cuando Israel invadió de nuevo parte del país tras una serie de ataques palestinos desde allí, y en 2000, cuando terminó esa ocupación.

Fue reforzada tras la guerra de 2006 entre el ejército israelí y Hezbolá para facilitar el retorno de la población y el reparto de ayuda humanitaria, así como para apoyar a las Fuerzas Armadas libanesas. Fue entonces cuando se incorporó España, hoy octavo país y tercero de Europa (después de Italia y Francia) que más tropas aporta: 657.

La misión está liderada desde febrero por un español: Aroldo Lázaro Sáez. La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha conversado con él y con el jefe del contingente español, el general de brigada Melchor Marín Elvira, para transmitirles ánimos tras el ataque, ha explicado en un acto en Madrid por el 25 aniversario del Instituto Universitario General Gutiérrez Mellado. La FINUL ya estuvo al mando de un español, el general Alberto Asarta, entre 2010 y 2012.

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