Asesinado a tiros un diplomático turco en el Kurdistán iraquí
Turquía advierte de que dará una "respuesta apropiada" tras el ataque, en el que ha muerto también un ciudadano iraquí y otro ha resultado herido grave
Un diplomático turco ha muerto este miércoles en un ataque con armas de fuego en un restaurante de Erbil, en el que también ha fallecido un ciudadano iraquí y otro ha resultado herido de gravedad, según ha informado la Asayish, las fuerzas de seguridad de la región autónoma del Kurdistán iraquí. El Gobierno de Turquía ha condenado duramente el atentado y el portavoz de la presidencia, Ibrahim Kalin, ha prometido que Turquía “dará la respuesta apropiada”.
Los hechos se han producido a las 14.30 hora local de este miércoles (una hora menos en España) en el restaurante HuQQabaz, situado a 3,5 kilómetros del Consulado General de Turquía y en una zona de la capital kurdoiraquí de oficinas y centros comerciales muy concurrida por empleados de los consulados y las empresas internacionales radicadas en el norte de Irak. Según testigos citados por los medios locales y turcos, un hombre penetró en el local con dos pistolas y, tras amenazar a los empleados, abrió fuego contra unos comensales, después de lo cual huyó en un vehículo que le esperaba fuera. El relato varía, con todo, sobre si los individuos que han sufrido los disparos estaban sentados en la misma mesa o en mesas separadas. El Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía ha afirmado, además, que hubo tres atacantes.
Tras ser evacuadas las víctimas en ambulancias, las fuerzas de seguridad han acordonado la zona y las carreteras de salida de la ciudad han sido bloqueadas, según explicó el periodista local Ali Antar en declaraciones a la cadena CNN-Türk.
“Esta tarde, un funcionario de nuestro Consulado General en Erbil ha caído mártir en un atroz ataque mientras se encontraba fuera de nuestras oficinas consulares”, ha informado el Ministerio de Asuntos Exteriores turco mediante un comunicado: “Hemos solicitado a Irak y a las autoridades regionales que encuentran rápidamente a los perpetradores del ataque”. Tanto la Unión Europea como Estados Unidos, cuyas relaciones con Turquía se han resentido en los últimos años, se han apresurado a condenar el atentado.
Decenas de diplomáticos turcos asesinados
En Turquía, el asesinato del diplomático ha sido una conmoción que devuelve al país a décadas olvidadas. Entre 1973 y 1994, 34 diplomáticos, empleados consulares y familiares fueron asesinados en diversos puntos del planeta, desde Los Ángeles a Sidney, pasando por Madrid. Los autores de la mayoría de estos ataques fueron miembros de la organización ultranacionalista Ejército Secreto para la Liberación de Armenia (ASALA), que perpetró decenas de atentados en supuesta represalia por las masacres sufridas por los armenios del Imperio otomano en 1915. También hubo dos ataques llevados a cabo por el grupo griego de extrema izquierda 17 de Noviembre a principios de la década de 1990 en la legación turca en Atenas.
Desde hace 25 años no se había producido un ataque directo contra diplomáticos turcos, si bien 5 policías adscritos a los servicios consulares de Turquía murieron en una emboscada en Mosul (Irak) en 2004 y otro en un ataque de la milicia islamista Al Shabab contra la Embajada turca en Mogadiscio (Somalia) en 2013.
En declaraciones a los medios, el jefe de la diplomacia turca, Mevlüt Çavusoglu, ha explicado que ha conversado con su homólogo iraquí, Mohamed Alhakim, y con el Gobierno regional del Kurdistán iraquí: “Nuestras agencias de inteligencia están trabajando también en ello. Haremos todo lo posible por esclarecer lo ocurrido”, explicó Çavusoglu, a la vez que se expresó con cautela sobre la posible autoría: “Este tipo de acciones uno piensa en un atentado terrorista, pero dos iraquíes de la mesa contigua también fueron atacados”.
La mayoría de los medios turcos y los analistas de seguridad del país euroasiático se inclinan por culpar al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), grupo armado en guerra contra Turquía desde 1984 cuyas principales bases militares se hallan en la cordillera de los montes Kandil, en el Kurdistán iraquí. Tanto Turquía como EE UU y la Unión Europea lo incluyen en su lista de organizaciones terroristas. Sin embargo, según informa la televisión local Kurdistan 24, el portavoz del ala militar del PKK, Diyar Deniz, negó que el grupo kurdo esté tras el ataque. “No tenemos información sobre dicho incidente y solo hemos sabido de él a través de los medios”.
Desde su última gran ofensiva en 2015-2016, que pretendió trasladar la guerra de las montañas a las ciudades kurdas de Turquía, el PKK ha sufrido un revés tras otro y diversos analistas consideran que se ha roto “la espina dorsal” de la organización en el interior de Turquía. El uso de alta tecnología militar —en especial, drones armados— ha provocado numerosas bajas en las filas del grupo armado, que anteriormente utilizaba las escarpadas cordilleras que hacen de frontera entre Turquía e Irak para refugiarse de los ataques turcos. El año pasado, las Fuerzas Armadas turcas intervinieron en el norte de Irak y establecieron varias bases militares con el objetivo de cerrar las rutas que utilizan los rebeldes kurdos para infiltrarse en Turquía. La semana pasada, el alto mando militar turco anunció el inicio de la operación Pençe 2 (Garra 2) y el propio PKK ha reconocido que los bombardeos turcos han provocado la muerte de varios milicianos, incluidos dirigentes de alto nivel.
El Gobierno regional kurdoiraquí mantiene un precario equilibrio en esta guerra ya que sus ciudadanos no ven con buenos ojos lo que consideran una violación de su soberanía para atacar al PKK, un grupo que fue clave a la hora de detener la ofensiva del Estado Islámico en el norte de Irak en 2014. Pero, al mismo tiempo, Erbil mantiene excelentes relaciones políticas con Turquía, de quien depende buena parte de su economía.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.