Corbyn, acusado de llamar a May “mujer estúpida”

Las cámaras del Parlamento británico captaron claramente el momento. Acalorado tras un intenso cara a cara con Theresa May, en el que la primera ministra siguió defendiendo su acuerdo del Brexit y se negó a adelantar la votación, Jeremy Corbyn se sienta en su escaño y murmura para sus adentros "estúpida mujer".Ante las protestas de muchos diputados conservadores, el presidente de la Cámara, John Bercow, llegó incluso a requerir de los servicios de un intérprete de labios. Dos horas después, Bercow ha concluído que "era fácil de ver" que las palabras proferidas por Corbyn bien podían haber sido "estúpida mujer". No decidió hacer nada al respecto, a pesar de las protestas de los conservadores.

El lider laborista se ha negado a pedir disculpas e insiste en que lo que dijo exactamente fue "estúpida gente". No convenció a nadie. Varias diputadas de su formación le exigieron que rectificara y solicitara perdón a la primera ministra. "No está bien. La sesión de control está siempre sometida a mucha tensión, pero confío en que Jeremy aceptará que este tipo de comportamiento no está su normalmente bondadosa naturaleza, ni es algo que podamos esperar de los hombres progresistas", escribía la diputada Stella Creasy en su cuenta de la red social Twitter. Lo remató con el hashtag #LlamandoelsigloXXI.

En la última sesión del Parlamento antes del receso navideño, May ha logrado, sin pretenderlo, el indudable acierto político de trasladar parte de la presión al líder de la oposición. No solo porque todos los medios británicos se dedicaron durante el miércoles a contratar a sus propios intérpretes de labios para confirmar la metedura de pata de Corbyn, sino porque finalmente gran parte del debate ha girado en torno a la indecisión del líder laborista en presentar una moción de censura. Algo que le reclaman gran parte de los suyos, junto a los nacionalistas escoceses del SNP y los liberales demócratas.