Andrea Venzon, presidente de Volt: el entusiasmo por renovar la política europea
El nuevo movimiento paneuropeo y transnacional se presenta en sociedad en Holanda
El italiano Andrea Venzon (26 años) trabajaba como consultor en el sector privado, cuando recibió una descarga metafórica. Fue el 23 de junio de 2016, el día en que estalló el Brexit. El efecto emocional que le produjo el hecho de que Reino Unido abandone la UE, le metió de lleno en política. Fue sin darse cuenta, porque solo pensó en la defensa de la Europa unida y de sus ideales, “cuando los partidos de siempre no parecen hacer nada”, asegura. Su reacción visceral desembocó en el nacimiento de Volt (por la energía del voltio). “Un término reconocible en todos los países, para un movimiento paneuropeo y transnacional que devuelva a la gente la esperanza en la política”. Hoy es su presidente.
Alumno de la Universidad Bocconi, de Milán, su ciudad natal, y de la Warwick Business School, de la Universidad inglesa de la misma ciudad, Venzon lanzó el 29 de marzo de 2017 una página de web expresando su frustración e ideales. Le acompañaron dos amigos, la francesa Colombe Cahen-Salvador, y el alemán Damian Boeselager. Sin más apoyos ni patrones. “El primer día recibimos centenares de respuestas positivas. Gente que sentía la necesidad de hacer política de otro modo. Ahora tenemos 15.000 miembros en más de 30 países dispuestos a trabajar con visión paneuropea”, dice, en conversación telefónica, a punto de viajar a Holanda. En la capital del país, tiene previsto presentar la Declaración de Ámsterdam, un programa único para acudir a las elecciones al Parlamento Europeo de 2019. No está mal, para un joven ajeno a la política profesional hasta hace dos años escasos, que reside ahora entre Bruselas a Italia, e indica orgulloso que hay ya “partidos registrados con el nombre de Volt en 10 países, dentro y fuera de la UE: Italia, Alemania, España, Francia, Suecia, Dinamarca, Holanda, Bélgica, Bulgaria y Austria”. Nadie les financia y sus ingresos llegan a través de donativos personales. “Todo lo hemos hecho online”.
Visionario, pues quiere cambiar el panorama político europeo, y realista, porque “hay que romper la burbuja de los partidos tradicionales”, Venzon y sus seguidores encarnan la generación millennial. El promedio de edad es de 35 años, un 45% son mujeres (aunque esta cifra varía algo según los países) y se proponen una regeneración en toda regla. Quieren “ciudades sostenibles; renacimiento económico sin desigualdad social; empoderamiento ciudadano; reforma de la UE; y lo más importante, que Europa tenga una sola voz”. De ahí que empiecen por el Parlamento Europeo, “que debe ser fuerte para poder aplicar estas ideas, a las que cualquiera se puede unir”. Este es un dato importante, dado que Volt ha recibido “llamadas de partidos consolidados, y aunque hablamos con todos, somos independientes y tenemos nuestra propia identidad”, puntualiza. Él dice que es la única forma de ser paneuropeo, y por eso no escoge un lugar concreto del arco político. “Nuestra visión es amplia, podemos ser liberales en lo económico, y progresistas en lo social”. Todo lo que sea unir Europa es bienvenido. Los nacionalismos o las propuestas de separación, no tiene aquí cabida.
Para evitar el mimetismo con los partidos tradicionales de los países donde cuentan con representación, en Volt han observado bien a sus partidarios. “Creemos que las antiguas divisiones entre derecha e izquierda, y sus extremos, ya no representan a muchos votantes. Con los políticos, lo importante es que la gente sepa de qué les hablan”. Venzon, que proclama sin rubor su “espíritu europeo”, espera ser también “constructivo, porque buscamos soluciones para una Europa unida”. Está revolucionado, y es por el entusiasmo.
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